Blogia
crossovers

Historias

KUMIAI 14ª parte: Good Good

-Macuto y Elegancia: ¡Empecemos!
Elegancia saltó hacia atrás se sacó un consolador de vete a saber dónde y entonces…
-E: ¡Prístino vicio dame el poder!
Elegancia empezó a brillar, estiró sus brazos y piernas, cuando terminó estaba disfrazada de algo parecido a una colegiala japonesa con toques sadomaso.
-E: Yo soy la guerrero que lucha por el alcohol, la fiesta, las drogas y el sexo, Guerrero Vicio y en nombre del vicio, ¡te castigaré!
-Litos: La verdad, disfrazada así da un poco de miedo.
-Ani-chan: No sé cómo no le da vergüenza.
-Karoru: Pues tú ibas más o menos igual.
-A: Eso es mentirita.
-K: Lo que tú digas.
Macuto atacó primero, se dirigió corriendo hacia Elegancia y de un golpe seco tiró una bomba de humo al suelo.
-K: Menos mal que estamos a una distacia segura, no se les ve.
-L: ¡Si no están! Se ha disipado el humo y no está ninguno de los dos.
-K: Se han pirado los muy mamones.
-A: ¿Y ahora qué hacemos?
-L: Nada, esperar, tarde o temprano volverán, se han dejado el porro encendido.
-A: ¡Hay que apagarlo!
-K: Mejor dedícate a hacer otra cosa, no quieras morir tan pronto.
-A: ¡Vale! Pues haré inglesito.
-K: ¿Cómo vas a hacer inglés?
-A: Con estos libritos.
-L: ¿De dónde los has sacado? Son de Macuto.

-A: Estaban aquí, en el suelo, dentro de esta mochila. Buenito, yo voy haciendo este ejercicio, ¿qué pone aquí?
-L: Pone que traduzcas a tu idioma.
-A: ¡Ah! ¡Vale! A ver, “a close friend” es “un amigo cerrado”, “a male parent” es un “mal pariente”, lo hago bien, ¿verdad?
-K: No has acertado ninguna.
-A: Gilipepas, si es que lo ponen muy difícil.
-L: Tardan mucho. ¡Bajad ya del árbol! Ya fumaréis luego.
-K: ¿Sabías dónde estaban?
-L: Sí, simplemente había que fijarse en el rastro de humo que dejaban.
-E: Prepárate, inútil, vas a morir.
Elegancia pegó un salto y justo cuando le iba a dar a Macuto, ambos desaparecieron.
-K: Ya estamos otra vez, a este paso no terminaremos nunca.
-A: Bueno, como inglés es muy difícil haré mates… bueno, mejor dejo las mates, a ver que más hay.
-L: Hay libros de distintas cosas, una fiambrera con un papelito que pone “Mamá te quiere, besitos”, no sé cómo no le da vergüenza a su edad, un paraguas que posiblemente también le haya metido su madre, una DS pero sin ningún videojuego, así que no creo que juegue mucho, en un estuche para protegerla, un CD que pone vídeos de técnicas ninja que lo más probable es que en verdad esté lleno de porno y una agenda escolar.
-A: ¿Cuántos añitos tiene?
-L: Según la fecha que pone en su carnet, creo que debe tener 20 años, así que o ha repetido muchas veces, o los ninjas deben estudiar muchos años.
-K: Hombre, muy listo no parece.
-L: Espera, vamos a ver que hay en el bolsillo pequeño.
-A: No está bien mirar en las cositas de los demás.
-L: Tranquila, utilizo guantes para no dejar huellas y luego dejaré las cosas tal como estaban.
-A: ¡Jo! Yo no me refería a eso… ¡oh! Una mariposita.
-K: Como siga un poco más a la mariposa se va a perder.
-L: Déja que se entretenga, en cuanto termine de mirar la mochila, ya nos encargamos de ella.
-K: ¿Qué hay en el bolsillo pequeño?
-L: A ver, hay un móvil, un paquete de pañuelos, una cartera con unas cuantas monedas y un llavero con dos llaves. Nada interesante, nos ha tocado un ninja pobre.
-K: Vaya mierda.
-A: ¡Mirad! He encontrado una piedrita rara supermona.
-K: ¿Ya vuelves de tu viaje por lo desconocido?
-L: No debes coger las cosas del suelo y eso no es una piedra rara, es una mina.
Silencio sepulcral.
-L, K y A: ¡Kyaaaahhhhh!
Salimos corriendo en distintas direcciones. Pensé que si había una, podía haber más, así que me paré en seco, di media vuelta y volví corriendo al lugar donde estaba la mochila. Cuando llegué, volví a meter todas las cosas de Macuto en su mochila, la cerré y la dejé bajo un árbol. Tenía que empezar a buscar a Karoru y a Ani-chan.
-L: ¡Karoru! ¡Ani-chan! ¿Dónde estáis?
-K: ¡Aquí!
-L: ¡Coño! ¡Qué susto! Pensé que te habías ido corriendo y que estarías muy lejos.
-K: ¡Qué va! Corrí los primeros 4 segundos, luego me cansé y me senté.
-L: Bueno, al menos a ti no te tendré que buscar.
-K: ¿Esa que está dando vueltas a un árbol no es Ani-chan?
-L: Pues sí, ¿qué hace? ¡Ani-chan!
-A: ¡Lititos! ¡Qué miedo he pasado! No paraba de correr en línea recta y creía que el bosque no tenía salida.
-K: En línea recta, lo que se dice en línea recta, no ibas.
-L: Bueno, mejor no movernos de aquí, Ani-chan, ¿dónde has encontrado la mina?
-A: Creo que detrás de ese arbolito.
-L: ¿Estaba enterrada? ¿Tapada por hojas?
-A: No, no estaba enterrada.
-L: Bueno, iremos los tres poco a poco hasta ese árbol y miraremos un poco por la zona, tened cuidado.
-K: Buf, no paran de ocurrir cosas chungas.
Fuimos poco a poco, yo iba el primero, ellas detrás de mí, pegadas a mi espalda, miramos detrás del árbol y encontramos una caja llena de minas.
-L: Ani-chan.
-A: Dime.
-L: ¿La mina estaba dentro de esta caja con las otras minas?
-A: Sí.
-L: ¡¿Y por qué no lo has dicho?!
-A: No me lo habéis preguntado.
-K: Pensábamos que el bosque estaba lleno de minas.
-A: ¿Qué? ¿Qué el bosque está lleno de minas? ¡Kyaaaahhhh!
-K: ¡¡Vuelve aquí!!

Karoru y yo nos sentamos en el suelo mientras esperábamos a que Ani-chan se cansara de dar vueltas a un árbol.
-L: Menos mal, no es seguro, pero creo que todas las minas del bosque están aquí. Bueno, todas las minas y el chocolate.
-K: ¿Cómo? ¿También hay chocolate?
-L: Supongo que le dirían que colocara las minas y que luego hiciera lo que quisiera.
-M: Pues sí, has acertado. Me dijeron que las pusiera, me traje el chocolate para hacerme unos porretes y, bueno, empecé fumando y se me olvidó colocar las minas.
-L: Un segundo, ¡Elegancia! ¡Macuto dice que si le ganas en menos de 10 segundos te dará todo el chocolate que hay en la caja!
-M: ¿Qué? ¡Yo no he dicho eso!
Elegancia apareció de la nada con los ojos enrojecidos, pegó un gran salto.
-E: ¡Frotamiento mortal!
Rebotó en el suelo y salió disparada hacia Macuto. Le dio un fuerte golpe, que empujó al ninja contra un árbol. Antes de que nos diéramos cuenta, Macuto había atravesado el árbol y se dirigía, inconsciente y a una gran velocidad, contra unas rocas. Una gran explosión.
-E: Choco Party, Good Good, Choco Party, Good Good, ¡oye! ¿Por qué pasáis de mí?
-K: ¿Estará vivo?
-L: Puede ser, vamos a ver.
-A: Pobrecito.
Llegamos al lugar. La roca se había roto en miles de trozos, pero no encontrábamos a Macuto.
-A: Una preguntita, ¿los libros flotan?
-K: No, los libros no flotan.
-A: Entonces eso de allí no es un libro.
Miramos al lugar que nos señalaba Ani-chan, un libro estaba levitando, se abrió, salió un destello. Cuando el destello se apagó pudimos ver que alguien había surgido de él.
-Crossovers: Veo que llego justo en el momento indicado, ¡encantado! ¡Me llamo Crossovers!
-L: Tú eres el que hablaba con la princesa Momo en el Reino Seta cuando estábamos en la carrera de karts.
-C: Muy observador. Bueno no perdamos el tiempo. Hay algo que no sabéis, o al menos no todos, y ha llegado el momento de desvelar este secreto.
-K: ¿Secreto?
-C: Habéis luchado contra dos oponentes, los cuales no han muerto.
-A: ¿Cómo? ¿Buffy está vivito?
-E: ¿Macuto está vivo? ¿No he ganado?
-M: ¡Sí! Sí que has ganado.
-K: ¡Macuto!
-M: Ha sido divertido hasta que ha llegado este tipo, ¿por qué se lo has dicho?
-C: Las cosas ocurren en un momento preciso, ni antes, ni después. Era el momento de que todos lo supieran.
-M: ¡Tonterías! Di la verdad, ¿para qué has venido?
-C: Esa información es confidencial.
-M: ¡Paso de ti! Bueno chicos, me las piro, la próxima vez que luchemos no será tan fácil ganarme, ¡adiós!
-A: ¡Hasta lueguito!
-E: Bueno, yo me voy a por mi chocolate.
-K: Si estaba en esa caja, que sepas que se la ha llevado.
-E: ¡¿Por quéééééééééééé?!
-L: Venga, chicas, que falta poco para salir del bosque, la puerta puede que esté allí.
Empecé a ir poco a poco para poder hablar con Crossovers y que no nos oyeran mis compañeras.
-L: ¿Quién eres? ¿Qué quieres de nosotros?
-C: Ya te lo he dicho, me llamo Crossovers. Estoy aquí porque ella me dijo que tenía que ayudaros. Es todo lo que puedo decir de momento. Cuantos más mundos visitéis, más información te podré dar.
-L: Al menos dime cómo te pusiste en contacto con ella.
-C: Lo leí en este libro mágico que me permite viajar a determinados mundos.
-L: ¿Así es como has llegado a este mundo?
-C: Bueno, concretamente a este mundo llegué mediante unas hojas que me dio ella. Las añadí al libro y una vez utilizadas desaparecerán.
-L: ¿Quieres decir que para llegar aquí no te servía tu libro?
-C: Exacto. Con mi libro puedo viajar todas las veces que quiera a los mundos que pertenecen a Dôamamaka. Este en el que estamos no pertenece, así que para poder venir y contactar con vosotros, he necesitado la ayuda de ella. Bueno, ahora sí que no te cuento nada más.
Llegamos a la puerta. La cruzamos todos menos Crossovers, él dijo que al llegar al siguiente mundo, nos estaría esperando allí.
Entramos al siguiente mundo, un vagón de tren con vistas al mar.

KUMIAI 13ª parte: Mochilo

Entramos en el siguiente mundo, una bruma espesa en un bosque de bambú. Nuestra ropa volvió a cambiar, parecía actual, pero algo en esa ropa me recordaba al Japón medieval.
-Litos: Uno, dos, tres y cuatro, vale, estamos todos.
-Ani-chan: ¡Cuánta nieblita! No se ve nada.
-Karoru: No hay ni un puñetero mundo normal.
-L: No te quejes, mientras no tengamos muchos problemas y podamos continuar todo irá bien.
-Elegancia: Nuestra Karoru es así, nunca cambiará.
-K: Dejadme tranquila.
-L: Bueno, ¿qué hacemos? La niebla es muy espesa y justo sale el sol, quizás tengamos que esperar un par de horas a que se despeje un poco.
-E: No, no, no, venga, vamos, será divertido si nos perdemos.
-A: ¡No! Yo no quiero perderme, me da miedito.
-K: Pues eres la que más experiencia tiene en el tema.
-L: Entonces iremos andando poco a poco, no os separéis mucho.
Caminamos durante más o menos media hora, pero al no tener reloj, no sabíamos exactamente cuanto tiempo había pasado. El paisaje no cambiaba, todo parecía igual.
-K: ¿No hemos pasado ya por aquí?
-L: A mí también me lo parece, creo que no paramos de dar vueltas.
-E: Al menos ha despejado un poco, aunque tendría que haber sido más para que pudiéramos ir más rápido. Vamos demasiado lento, me aburro.
-K: Menuda chorrada, aunque no hubiera niebla no estaríamos corriendo.
-E: Si es que no paráis de fastidiarme. Ani-chan, ¿qué haces tan concentrada mirándome la espalda?
-A: Jopelines, no me distraigáis, que si no me perderé.
-K: No creo que sea necesaria tanta concentración.
-A: ¡Mecachis! Ya está, ahora seguro que me pierdo, es que habláis por los sobacos.
-L: Se dice hablar por los codos, a ver si aprendes de una vez a utilizar los modismos. Venga chicas, continuemos un poco más.
Nos costó, pero por fin llegamos a un pequeño claro en el bosque de bambú. No sabíamos si alguien habitaba ese mundo, pero lo que era seguro es que tocaba luchar.
-K: ¿A qué huele?
-E: ¡Ummm! ¡Qué bien huele! ¡Cómo me gusta!
-A: Yo no he sido.
-K: ¿Perdón?
-A: Que yo no me he tirado ningún pedito.
-E: ¿No tienes nariz?
-A: Es verdad no huele a pedito.
-L: Pero, si huele a porro.
-E: ¡Síííííí! Me encanta, parece como si rejuveneciera.
-K: Pues te va a costar lo tuyo.
-E: Ven aquí Karoru, que te voy a pegar una pequeña paliza de nada.
-A: Peleitas no, ¿eh?
-L: A ver, callaos un momento. Mirad, el porro.
-E: ¡Qué bien! ¿Me lo das?
-L: Todo tuyo, no es necesario para poder continuar. Pensemos un poco, el porro está tirado en el suelo. Eso es que alguien ha estado cerca de aquí hace muy poco.
-K: A lo mejor lo ha tirado al oirnos y se ha ido corriendo.
-E: ¡Qué buena persona! Compartir conmigo es lo mejor que se puede hacer, me encantan las personas altruistas.
-A: Menos mal que lo hemos cogidito, hemos evitado un incendio.
De repente empezó a haber mucho movimiento a nuestro alrededor.
-K: Esas cañas de bambú se han movido, ¡y esas!
-L: Sea lo que sea no deja de moverse.
-A: ¡Es muy rapidito!
-L: ¡Cuidado! ¡Al suelo!
Nos tiramos al suelo, alguien nos había lanzado algo. Todo estaba ocurriendo muy rápido. Se oyó un fuerte golpe contra el suelo varios metros detrás de nosotros.
-K: ¿Qué ha sido eso?
-E: ¿Nos levantamos ya?
-A: Sí, por favorcito, que Elegancia me está chafando.
-E: ¿A qué te parece divertido?
-A: No.
-L: Sí, levantaos. Mirad, esto es lo que nos ha lanzado.
-K: ¿Un shuriken?
-A: Una estrellita, ¡qué mona!
-E: De mona no tiene nada, ¡joder! ¡Cómo pincha!
-L: ¿Qué creías? ¿Qué era de plástico?
-E: Sí.
-L: Pregunta fácil, ¿Quién lanza shurikens?
-A: ¡Un repartidor de Telepizza!
-K: ¿Desde cuándo los repartidores de Telepizza lanzan shurikens?
-A: ¿No lo hacen?
-K: ¡No! ¡Me pones de los nervios! ¡Un ninja! El que nos ha lanzado este shuriken es un ninja.
-E: Karoru, tranquilízate, ¿quieres pegarle una caladita a mi porro?
-K: Dejadme ya.
-L: Será mejor que nos concentremos en encontrar a este ninja y en saber qué hizo ese ruido que oimos detrás de nosotros.
Dimos media vuelta y retrocedimos un par de metros.
-K: ¿Habéis encontrado algo?
-A: ¡Sí! ¡Mirad! Una piedrecita.
-L: Deja eso en el suelo, no es una piedrecita es una cagada de conejo.
-A: ¡Jope! ¿Quién ha dejado eso en el suelo?
-K: Estoy cansada de andar, me duelen las piernas. Dejemos de buscar.
-E: Mueve el culo, que ahora empieza lo bueno.
-K: Eres una pesada, ¡coño!
Karoru se tropezó con algo, por suerte Elegancia estaba a su lado y con un salto de 3 metros la agarró, la magreó y la dejó en el suelo.
-E: Soy la mejor.
-K: ¡Guarra!
-L: ¿Con qué te has tropezado?
-K: Con eso.
-E: Es un tío disfrazado de ninja.
-L: ¡El culpable!
-A: ¿El repartidor de Telepizza?
-L: Te hemos dicho que no era repartidor de Telepizza, que era ninja.
-K: Pero si está sobando.
-E: El del ruido de antes habrá sido él, mirad el boquete que ha dejado en el suelo.
-K: ¡Tú! ¡Cosa! ¡Despierta!
El ninja empezó a despertarse.
-¿?: Mamá, un ratito más.
-K: No soy tu madre, pero me cago en ella.
-L: ¿Quién eres?
-¿?: ¡Uy! ¡Cuánta gente! ¡Quietos! ¡No os mováis!
-A: Este chico está muy malito.
-L: Este va colocado.
-E: Espera que busque.
-K: Tía, pero no le metas mano.
-¿?: ¡Jajaja! ¡Qué cosquillas! ¡No! Hormigas, las hormigas me comen.
-E: A ver, he encontrado esta petaca de 3 litros vacía y esta cajita vacía.
-L: Tendremos que mirar que contenían.
-E: Ya lo sé, la petaca alcohol del barato.
-A: ¿Y cómo lo sabes?
-E: He metido la lengua.
-A: Eres una cerdita.
-L: ¿Y la caja?
-E: Después de pasar la lengua puedo decir que contenía el kit del perfecto porreta.
-K: No sé cómo eres capaz de meter la lengua, ¿y si hubiera estado envenenado?
-E: No habría pasado nada, soy inmune al veneno.
-L: Yo lo dudaría.
-¿?: Hay lucecitas… ¡qué bonitas!
-K: Tendremos que esperar a que se le pase.
-L: No hace falta, si lo vencemos en estas condiciones la lucha será más fácil. Con el mínimo esfuerzo conseguiremos el máximo resultado.
-K: ¡Uoh! Jamás se me habría ocurrido.
-A: Pero hay que ser buenitas personas. Eso no se hace.
-L: ¿Te quieres volver a enfrentar tú sola a un enemigo?
-A: No.
-L: ¿Entonces?
-A: Vale, aprovechemos ahora que está dormidito. Jeje.
-E: ¡Me toca a mí! ¡Me toca a mí!
-L: Es más rápido si le atacáis entre las tres.
-K: ¿Sólo nosotras?
-L: No pienso mancharme las manos, soy el cerebro del equipo.
-E: ¿Nos estás llamando inútiles?
-L: Sí.
-E: Bueno, al menos es sincero. Pero no, está vez sólo voy yo, ¡Venga! ¡Por favor!
-L: Vale. Ves tú sola.
-E: Lucharé sola, soy la mejor.
-A: Ella lucha sola, jeje, como el grupo de música.
-K: El grupo se llama “Ella baila sola”.
-A: Pero si cantaban, ¿cómo iban a bailar?
-K: ¿Y sería más lógico que lucharan?
-A: Sí.
-E: ¡En barro! Una lucha tiene que se en barro.
-K: Nunca entenderé tu lógica.
-L: Esto, chicas, siento interrumpir vuestra inteligente conversación, pero el ninja ya no está.
-K: ¿Cómo? ¿Ha huido? ¡Nooooooooo! ¡Malditooooooo!
-A: No te enfades, Elegancia, que te pones muy feita.

-¿?: ¿Creéis que he huido? Sois muy estúpidos.

-E: ¡Mamón! ¡Baja del árbol! ¡O subo yo! ¡Groaaaaaaarrrrr!
-K: Parece que Elegancia va a digievolucionar.
-¿?: Jajaja. Mira que pensar que me había metido de todo. ¡Un ninja no hace esas cosas!
-L: Si no te estuvieras haciendo una raya de coca quizás serías más convincente.
-¿?: Paso de vosotros mogollón, ¡mierda! ¡Se me ha caído mi carnet de ninja!
Recogí el carnet del suelo.
-L: A ver… D.N.I. (Documento Ninja de Identidad) número ******** (es para proteger su intimidad), nacido en la Villa Oculta de la Hierba, nombre… ¡Jajajajajaja!
-K: A ver, a ver… ¿cómo te puedes llamar así? ¡Jajajajajajajajajaja!
-E: Pásamelo, ¡jojojojojojo! Ridículo, tío, es ridículo.
-A: Yo no pillo la broma.
-¿?: ¡Devolvédmelo!
-L, E, K: ¡Jajajajajajajajajajajajajaja!
-A: No lo entiendo, jooooo, yo también me quiero reir.
-L: Seguro que de pequeño te llamaban Mochilo.
-¿?: ¡Sí! ¿Cómo lo sabes? Siempre he odiado a los Fruittis.
-L: Lógico, si te llamas Macuto es obvio que de pequeño los niños te llamaran Mochilo.
-A: Explicádmelo, por favorcitooooo.
-L: Un macuto es un tipo de mochila.
-A: ¡Ahhhhhhhhhhh! Jejeje, ¡Jajajajajajajajaja!
-Macuto: Moriréis por esta ofensa.
-K: Este tío es muy delicado.
-E: Baja, baja, te estoy esperando desde hace rato.
-L: Elegancia, ¿estás segura de que quieres luchar tú sola?
-E: Sí, no os pongáis por en medio, no me voy a contener.
De un salto Macuto bajó del árbol.
-M: Espero que luego no me llores.
-E: ¿Llorar? ¿Yo? Soy especialista en cosas prohibidas.
-L: karoru, Ani-chan, alejémonos, mejor estar a una cierta distancia de este par de adictos.
-M y E: ¡Empecemos!
CONTINUARÁ

KUMIAI 12ª parte: Objetos Perdidos

Me desperté temprano, miré por la ventana, el sol lucía como el día anterior, un día perfecto para las carreras. Cuando llegué al salón sólo encontré a la Princesa Momo.
-Litos: ¡Buenos días!
-Princes Momo: ¡Buenos días!
-L: ¿Ninguna de mis compañeras se ha despertado?
-P: No, todavía no.
-L: Muy típico de ellas. ¿Siempre luce el sol y ocurren cosas buenas en este mundo?
-P: No, claro que no. Como en cualquier sitio, hay días que llueve o que no luce el sol, también hay días en los que ocurren cosas malas, pero contamos con la ayuda de un héroe.
-L: ¿Un héroe? ¿Y dónde está?
-P: Ahora no está aquí, está ayudando a un amigo en problemas, me hubiera gustado que le conocieras. Es tan bueno, tan valiente, salta tan bien, sé que hasta en mis sueños él vendrá a ayudarme.
-Elegancia: ¡Muy buenos días! Tengo tanta hambre que me comería a Karoru.
-Karoru: No te basta con despertarme, que además quieres comerme, vete a cagar.
-Ani-chan: ¡Buenitos días! Jejeje, tengo más hambre que el perro de un cojo.
-L: Se dice que el perro de un ciego.
-A: No, jeje, eso se dice perro alvarillo.
-L: Perro lazarillo.
-E: Alvariño, ummm, con lo bien que va por la mañana.
-A: ¿Es amigo tuyo?
-E: ¿Quién?
-A: Alvariño.
-E: Sí, es gallego, no te jode.
-L: Venga, daos prisa, que falta poco para que empiecen las carreras.
Cuando terminamos todos de desayunar, nos fuimos al circuito donde se celebraría la carrera.
-P: ¿Ya estáis todos preparados?
-L: Sí, ya nos hemos puesto la ropa que nos prestaste para pilotar más cómodos.
-P: Yo hoy no participaré, os veré desde las gradas. Los karts ya los tenéis en la pista. Nos vemos luego.
-L: ¡Hasta luego!
Nos dirigimos a los karts y nos montamos en ellos.
-E: Espero que hoy no te pierdas.
-A: Karoru, Elegancia te está hablando.
-K: Te lo dice a ti, so lerda.
-A: Hoy no me perderé, ya me han explicado como va el semáforo especial que han puesto para mí.
-L: ¿Semáforo especial?
-A: Sí. Tiene tres colores: rojo, amarillo y verde.
-K: Espero que sepas que se hace cuando aparece cada uno de los colores.
-A: Claro, que sí. Rojo significa que gires a la izquierda, amarillo que sigas recto y verde que gires a la derecha.
-L: Ya entiendo porque te pierdes siempre.
-K: ¿Qué tiene de especial este semáforo?
-A: No sé, creo que han dicho algo así como dispositivo de busqueda.
-E: Como me voy a divertir.
-L: Bueno, vayamos ya a la línea de salida.
Pusimos los karts en marcha. Había muchos seta que nos ayudan, así evitaban accidentes. En la carrera sólo participábamos nosotros cuatro, los seta que iban a participar se retiraron, dijeron que era más divertido ver a mis compañeras haciendo el ridículo, tenían toda la razón. El espectáculo estaba asegurado.
-L: Bueno, que gane el mejor.
-A: Entonces Karoru no gana.
-K: ¡Vete a cagar!
-E: ¡Quiero ver sangre!
La Princesa Momo estaba sentada en el palco, hablaba con alguien, no era un seta, pero tampoco era humano, ¿quién sería?
El semáforo encendió sus luces. Rojo, amarillo, ¡verde! Salimos todos a la máxima velocidad, era un circuito simple, muy simple, era circular, así que no había posibilidad de que Ani-chan se perdiera. Teníamos unos dispositivos para hablar entre nosotros.
-E: Mi carroooo me lo robarooooonnnn… oye, ¿Y Ani-chan?
-K: ¿Ya se ha perdido? Si acabamos de empezar.
-L: Lo importante es que esté preparada para cuando nos tengamos que ir de este mundo.
-E: ¡Lo oigo! ¡Alguien me llama!
-L: ¿Qué?
-E: Sí, alguien pide un taxi. Ahora vuelvo.
Elegancia salío del estadio montada en su kart a toda velocidad, el instinto le llamaba y tenía que acudir.
-Megafonía: Tin ton tin. Damas y caballeros, en la sección de objetos perdidos del circuito ha aparecido un kart con una chica llorando encima, si es de alguien, que acuda de inmediato a recogerlo por favor. Tin ton tin.
-K: ¿Qué hacemos? ¿Vamos? A mí me da palo.
-L: ¡Qué va! Que se quede allí esperando, así la tenemos localizada.
Justo venía una rampa.
K: ¡Mierda! Una rampa.
-L: ¿Qué pasa? Es fácil de saltar, no hay ni medio metro.
-K: Pero es que yo soy incapaz de saltar más de tres centimetros, ¡está comprobado científicamente!
-L: Creía que sólo era en los juegos de plataformas que no podías saltar.
-K: En la realidad no puedo saltar, pero en los juegos tampoco, por eso odio los plataformas. Me da miedo saltar, voy corriendo, me paro y salto.
-L: Eso es que no puedes darle a dos botones a la vez.
-K: ¿Dos botones? Yo le doy a la cruceta para correr y salto con el botón “A”.
-L: ¡Lela! Le das a la cruceta, le das al botón “B”, que es para correr, y luego le das al botón “A”.
-K: ¡Coño! No lo sabía. De todas formas me pararía antes de saltar, así que estamos en las mismas, ¡Mierda!
La temible rampa de un metro de alto. Yo la pasé sin problemas, Karoru cayó al estanque.
-K: ¡Uf! Menos mal. No cubre.
Se oyó un gran estruendo. Una de las puertas se había roto con una gran explosión, entre el humo aparecía Elegancia con cara de loca.
-E: Yuhuuuuuuuu.
-L: Ya estás aquí, ¿dónde habías ido?
-E: Un seta de esos estaba esperando un taxi, le he llevado a su destino con el kart, pero no le he cobrado, soy muy generosa.
-L: ¿Qué te ha dado?
-E: Un regalo, es secreto, sólo para mí, yeah. Te voy a alcanzar Litos.
-L: No creo, mira a Karoru.
-E: ¿Pero qué le pasa? ¡Qué cara más chunga!
-K: ¡Mi gayradar me avisa! Hay una pareja haciendo guarrerías en los baños de la zona norte del circuito. ¡Uoh!
Como era de esperar hubo un temblor de tierra y del estanque donde estaba Karoru empezó a salir una gran cantidad de un líquido… llamémosle “agua”.
-E: ¡Tsunamiiiiiiiiii!
Elegancia puso cara de suicida y de “A ver quien puede más, ¿la ola o yo? Como era de esperar la gran ola se la llevó por delante, con lo cual sólo quedé yo en la carrera. Pocos segundos después llegué a la línea de meta. Los premios los entregaba la Princesa Momo, pero como sólo yo terminé la carrera, el único que lo recibió fui yo.
El día se terminaba, ya estábamos delante de la puerta, la Princesa Momo nos acompañó.
-P: Me lo he pasado muy bien, ha sido muy divertido. Lástima que os tengáis que ir ya.
-K: Estoy muerta, desde que nos hemos metido en estos mundos no paro de hacer ejercicio, me quiero ir a mi casa.
-E: ¡Yeah! Me lo he pasado bomba, necesitaba acción y además he ganado dinerillo extra.
-L: ¿Pero no decías que no le habías cobrado?
-K: No te va a servir para nada en otros mundos.
-E: Es que siempre tienes que dar por culo.
-A: Sois unos malitos. Me habéis dejado abandonada. Estaba solita.
-K: Yo te habría dejado allí para siempre.
-A: Jopetas.
-L: Dejad vuestras chorradas para luego. Princesa Momo muchas gracias por todo, has sido muy amable con nosotros.
-P: No tenéis porque agradecérmelo. Lo he hecho encantada.
-L: Espero que nos volvamos a ver.
-P: Yo también espero que ese día llegué pronto.
Se abrió la puerta, la cruzamos, mirando hacia atrás y despidiéndonos de la Princesa Momo y de los seta que también habían venido a despedirse de nosotros. Se cerró la puerta.
-P: Ya puedes salir, ya se ha cerrado la puerta.
-¿?: Me los esperaba de otra manera.
-P: No lo entiendo, ¿por qué no has querido conocerles?
-¿?: No era el momento, ella me dijo que no era en este mundo, además, todavía no necesitan mi ayuda.
-P: No piensas contármelo.
-¿?: No, es un secreto, tú tampoco les has contado todo lo que sabías.
-P: Ya sabes que no podía, hay cosas que es mejor que no sepan todavía. ¿Cuándo les conocerás personalmente?
-¿?: En el próximo mundo que visiten, pero hasta mucho más tarde no tendré que actuar.
-P: Por suerte estás puertas no las puede utilizar todo el mundo.
-¿?: Parece que lo dices como si yo fuera malo.
-P: No te hagas el inocente.
-¿?: Bueno, vale. Por cierto, ¿de verdad me lo regalas?
-P: Claro, te prometí que te daría uno la próxima vez que nos visitaras.
-¿?: Muchas gracias. Eres una de las princesas más buenas que conozco.
-P: Tendría que ser la más buena, jeje, hablando de chicas buenas, ¿cómo está Satser?
-¿?: Muy bien. Cuanto más difíciles le ponen las cosas, más se esfuerza por superarse y conseguirlas.
-P: Yo no podría estar sola en el espacio, siempre luchando contra criaturas galácticas.
-¿?: Ahora la que se hace la buena eres tú.
-P: Jejeje, bueno es la hora de despedirnos. Espero que dentro de poco puedas venir a vernos.
-¿?: Sí, de eso puedes estar segura. Espero que la próxima vez que nos veamos esté tu héroe contigo. Bueno Momo, nos vemos.
-P: Saluda a todos de mi parte. Ve con cuidado.
-¿?: Eso haré.
Abrió su libro, salió un destello de su interior que le rodeó e hizo que desapareciera quedándose el libro levitando, se cerró y, a la vez, desapareció.
Entramos al siguiente mundo, una bruma espesa en un bosque de bambú.
CONTINUARÁ

KUMIAI 11ª parte: Precaución, Amigo Conductor

Entramos en la sala de descanso, una ciudad de setas. La ropa volvió a cambiar, ahora íbamos con ropa de calle, pero los colores eran muy vivos.
-Karoru: ¿Dónde estamos?
-Litos: En la sala de descanso, así que tranquilas, no corremos ningún peligro.
-Ani-chan: Jo, pero todas las provisiones se han echado a perder. Están todas mojadas por culpa de las olas.
-Elegancia: Tranquilos, si hace falta podemos comernos a uno de nosotros.
-Shiitake: No creo que sea necesario, jeje.
Un ser medio seta, medio humano nos estaba hablando.
-S: ¡Sean bienvenidos al Reino Seta! Soy Shiitake, la Princesa les está esperando, les llevaré al castillo, acompáñenme.
-L: Disculpa, pero, ¿dónde estamos? ¿Quién dices que nos espera? ¿Y cómo sabía que ibamos a venir?
-S: Este es el Reino Seta, un lugar apacible donde vivimos los seta. Les espera nuestra Princesa, todos la adoramos porque tiene un gran corazón. El resto de preguntas se las pueden hacer a la Princesa si desean.
-K: ¡Cómo mola! Parece un peluche raro.
-S: ¡Ay! No me digan esas cosas que me pongo colorado y se me caerán las esporas.
Acompañamos a Shiitake por la ciudad, antes de ir a ver a la Princesa, le pedimos que nos hiciera de guía por su ciudad.
-Matsutake: ¡Shiitake! Ya lo tengo todo preparado para la carrera, jeje. ¡Uy! ¡Ustedes son los invitados de la Princesa!
-S: Sí, son ellos, les estaba haciendo de guía por la ciudad antes de ir al castillo.
-M: ¿Puedo unirme?
-S: ¡Por supuesto!
Todo era precioso. Aquella ciudad estaba llena de vivos colores, estaba llena de alegría. Todos los seta que nos encontrábamos nos saludaban alegremente, como si en su vida hubieran tenido pena alguna. Justo entonces, llegamos a un majestuoso castillo blanco. Otro de estos seres nos esperaba en la puerta.
-Awatake: Sean bienvenidos al castillo de la Princesa, les está esperando.
El color blanco del castillo brillaba con la luz del sol, en su interior las distintas estancias reflejaban que ese era el castillo de alguien importante. Llegamos a los enormes jardines, a un lado, cerca de un estanque, había una chica sentada en una mesa tomando un té. Nos dirigimos hacia ella.
-A: Princesa, sus invitados han llegado.
-Princesa Momo: ¡Encantada de conoceros! Me llamo Momo, soy la Princesa de este Reino, sed bienvenidos al Reino Seta.
-S: Princesa, nosotros nos retiramos, nos vamos a las carreras.
-P: ¿Os apetece ir a las carreras? Os divertiréis.
-E: ¡Sí! En marcha.
-A: Venga, vale.
-K: Bueno, no hay nada mejor que hacer, ¿usted también se viene Princesa?
-P: No, yo me quedaré aquí, para cuando volváis habrá pastel y té para todos.
-L: Yo tampoco voy, prefiero quedarme dando una vuelta por el jardín.
-S: ¡Venga! Vamos antes de que empiece.
Se fueron los tres seta y las tres lerdas. La Princesa y yo empezamos a dar un paseo por los jardines.
-L: ¿Quién es usted?
-P: Por favor, tutéame.
-L: Vale, ¿quién eres? ¿Qué sabes de nosotros? ¿Perteneces a la organización?
-P: Me volveré a presentar. Soy la Princesa Momo, Princesa del Reino Seta y no, no pertenezco a la organización. Ella se puso en contacto conmigo, me dijo todo lo que tenía que saber sobre vuestro viaje. Sé que esta es una zona de descanso para vosotros, eso sí, a diferencia de otras zonas de descanso, no os cobraremos y podréis llevaros todas las provisiones que queráis, sois mis invitados.
-L: ¿Cómo te pusiste en contacto con ella?
-P: A través de mis sueños. Pude hablar con ella y ver todo lo que os había ocurrido antes de llegar aquí.
-L: Tengo que hablar con ella.
-P: Podrás hablar con ella cuando sea el momento, este no es su mundo.
-L: ¿Su mundo? Suponía que era algo así, los cambios entre sala y sala son enormes. Es decir, las puertas nos conducen a mundos paralelos.
-P: Sí, os llevan a otros mundos, pero te tengo que decir que todo lo que ocurra en cada uno de estos mundos es real. Todo es real, menos una cosa. Me dijo ella que esto tendría que quedar muy claro.
-L: ¿Te dijo que sólo me lo dijeras a mí?
-P: Sí, me dijo que sólo era necesario decírtelo a ti, que tus acompañantes no sabían nada.
-L: Y no deben saberlo. Dime, ¿qué no es real?
-P: La muerte de vuestros enemigos, es pura mentira.
-L: ¿Qué?
-P: Ellos son reales, las luchas que tenéis con ellos son reales, pero no mueren.
-L: Nos han engañado…
-P: Sí, habéis ganado, pero ellos querían haceros daño psicológico, pocas cosas afectan más que ver sufrir y morir a alguien.
-L: Me alegra saber que Buffy está vivo. No tiene que morir nadie.
-P: Ella también me dijo eso, pero no me explico el motivo, aunque supongo que es algo que no debo saber.
-L: Sí, mejor que no lo sepas.
-P: Bueno, no insistiré. Parece que ya han terminado y se están acercando. Esta noche dormiréis en el castillo, mañana volverá a haber carreras, así que si quieres participar, puedes hacerlo. Por cierto, las carreras son de karts.
-L: Perfecto, parece divertido.
Mis tres compañeras llegaron. Parecía que un camión de basura les había pasado por encima.
-L: ¿Qué os ha pasado? Parecéis un vertedero ambulante.
-E: ¡Ay! Me duele todo, mira que me han tirado muchas cosas a la cabeza, pero nunca me habían tirado un caparazón de tortuga. Me ha dado de lleno y me he caido al lago.
-K: Mi capacidad de salto nunca ha sido muy grande y. como no, había que saltar con el kart. Como es obivo, me he comido la pared.
-A: Yo me he perdido.
-E: Ha sido incrible, mira que el circuito era en ocho y no había posibilidad de perderse.
-K: Yo me he partido la caja cuando ha aparecido entre las gradas.
-A: A mí no me hace gracia, seguro que lo habéis hecho a propósito.
-K: Sí, no tenemos nada mejor que hacer que cebarnos contigo.
-E: Pero, ¿cómo lo has hecho?
-A: No lo sé, jopelines. Yo iba por la recta y luego ha venido la curva y… y… ya me había perdido. No sabía si volver para atrás o seguir o quedarme allí.
-E: Ani-chan, siempre, recto y muy rápido, pero ya sabes, cuidado con los enemigos.
-K: ¿Qué enemigos? Como no fueran los seta, como corrían los cabritos y siempre que tiraban algo nos daba, increible.
-E: Precaución, amigo conductor…
-P: Bueno, veo que os lo habéis pasado bien, mañana podréis volver a participar si queréis. Ya han traido el pastel y el té, vamos a tomarlo.
Era una tarde muy apacible, una suave brisa soplaba y el sol no dejó de brillar en ningún momento. Los tres seta y la princesa nos acompañaron mientras nos tomábamos el té y la tarta. Después dimos una vuelta por la ciudad antes de la cena, nos enseñaron distintos lugares de interés de la ciudad. La cena, como todo aquella tarde, fue muy tranquilo, sería porque estarían cansadas, pero Elegancia, Karoru y Ani-chan no dieron problemas.
-P: Bueno, como todavía es pronto, podemos ir a hablar a uno de los salones.
-K: Yo paso, estoy muerta, quiero dormir.
-E: Yo también me iré a dormir, que mañana quiero estar llena de energía.
-K: A ti te sobra la energía, siempre.
-E: ¡Qué mona! Mírala.
-A: Yo también tengo mucho sueñecito.
-L: Yo me quedaré un rato despierto, así puedo contemplar un poco más el castillo.
-A, K y E: ¡Buenas noches!
-P y L: ¡Buenas noches!
Empezamos a caminar.
-P: Se me había olvidado decirte algo.
-L: ¿El qué?
-P: Ella también me dijo que a parte de vosotros, ninguno de vuestros compañeros había entrado todavía en el primer mundo.
-L: Bueno, eso es positivo, nos da tiempo de eliminar a algunos enemigos antes de que entren, pero, ¿cuánto tiempo ha pasado en nuestro mundo? ¿Cuánto tiempo llevas esperando nuestra llegada?
-P: En vuestro mundo sólo han pasado treinta minutos. Tuve el sueño hace dos años, también fue cuando supe la fecha exacta de vuestra llegada.
-L: Una última pregunta, has dicho que ninguno de nuestros compañeros había entrado en el primer mundo, ¿quieres decir qué los mundos están colocados siguiendo un orden?
-P: Sí, cada puerta lleva a un mundo distinto, sólo a uno, a ningún mundo más y en sólo una dirección, por eso no podéis volver para atrás.
-L: Vale, bueno, nos vemos mañana, ¡buenas noches!
-P: ¡Buenas noches!
Me desperté temprano, miré por la ventana, el sol lucía como el día anterior, un día perfecto para las carreras.
CONTINUARÁ

KUMIAI 10ª parte: Hundir la Flota

-Litos: ¡Ani-chan, lucha con todas tus fuerzas!
-Ani-chan: ¡Nooooooooooooo!
-L: Ani-chan, nosotros confiamos en ti, sólo tú puedes salvarnos, eres nuestra última esperanza.
-A: Vale, jeje, lo haré.
-Karoru: Se lo ha tragado.
-Elegancia: Es que es tan especial.
-L: Dejadla, si se lo cree y es feliz, mejor para nosotros.
-Buffy: Bien, ¡empecemos!
-A: Jeje, ahora verás.
Ani-chan pego un salto para atrás sacó algo de su bolsillo y entonces…
-A: ¡Prístino Messenger dame el poder!
Ani-chan empezó a brillar, a dar vueltas y saltos, cuando terminó estaba disfrazada de algo parecido a una colegiala japonesa.
-A: Yo soy la guerrero que lucha por el mail en cadena y los emoticones, Guerrero Messenger, más conocida como Messenger Moon y en nombre de Messenger, ¡te castigaré!
-B: ¡Oh, no! Va vestida de marinerita, yo también quiero.
-A: Je, no me despistes, ¿te llamas Buffy porque cazas vampiros?
-B: ¡Eh! ¿Cazar vampiros? ¡Pero si están en peligro de extinción!
-L: Bueno dejemos que se maten.
Nos apartamos y nos pusimos en un rincón a hablar.
-L: Ya he terminado el Paper Mario 2.
-K: ¿Mola el final?
-L: A mí me ha gustado, te explica que ocurre después de que Mario se vaya y tal.
-E: Si no habláis de sexo no me interesa.
-K: ¿Mario se va?
-L: Claro, vuelve al Reino Champiñón.
-K: ¿Sin Peach?
-L: No, lela, ¿cómo se va a ir sin Peach?
-K: ¡Ah! Es que Link lo hace.
-L: Link es gay y todos lo sabemos.
-K: Yo creo que en el fondo le mola Ganondorf.
-L: Sí, le molan los machotes.
-K: ¡Uy! Pero no salía como una novia en el último juego.
-L: No, es un rumor, se ha demostrado que sólo iban juntos de compras.
-E: Me aburrooooo.
-L: Venga, ¿de qué quieres hablar?
-E: Ummm, no sé, pregunta ¿cómo se llaman los de Cuenca?
-A y B: ¡Cuencos!
-L: ¿Cómo van a llamarse cuencos? Se llaman conquenses.
-B: Jamás lo habría imaginado.
-A: ¡Qué original!
-L: ¡Mataros ya de una vez!
-B: Pero que malo, quiere que nos matemos.
-A: ¡Uy! Es verdad, se me había olvidado, yo tenía que eliminarte.
-B: ¿Qué? ¡Pero que cerda!
-A: No, no soy una cerda, soy la oveja Dolly, jeje.
-L: Esto va para largo.
-E: Mirad lo que me he encontrado tirado por ahí.
-K: ¿Un cofre?
-L: ¿De dónde lo has sacado?
-E: Estaba en una habitación cerrada con candado.
-L: No estaba tirado por ahí, choriza, lo has mangado.
-K: Sí, es mejor devolverlo.
-L: ¿Quién ha hablado de devolver?
-E: Bien, para nosotros.
-L: Lo repartiremos equitativamente. Yo me quedo un 40% y para cada una de vosotras un 20%.
-K: ¡Ey! ¡Qué eso no es equitativo!
-L: Sin mí no harías nada, soy el único importante.
-B: ¿Y para mí no hay?
-L: ¡Tú ya deberías estar muerto! Ani-chan, ¿qué haces?
-A: Estoy jugando con Buffy al parchís.
-E: Juguemos al teto.
-L: Bueno las partes ya están hechas, podéis cogerlas.
-K: ¿Qué harás con tu parte?
-L: Es obvio, comprarme cosas.
-K: No te va a durar ni una semana.
-L: Tranquila, yo no soy como vosotras, sé administrarme.
-E: Yo no sé ni lo que significa esa palabra.
-L: Administrarse es gastar, pero sin malgastar.
-K: ¡Ohhh! ¡Qué gran verdad!
-L: Ani-chan no podemos perder más el tiempo, termina con él.
-A: Jo, vale.
Empezó la gran batalla en el barco pirata.
-A: ¡Mail en cadena “Mantra budista de la suerte”!
Rozó a Buffy lo que hizó que saliera volando y en medio del aire hizo uno de sus ataques.
-B: ¡Viento en popa a toda vela!
Un fuerte viento tiró a Ani-chan al suelo e hizo que el barco empezara a moverse. Buffy se acercó a Ani-chan, pero ella le agarró.
-A: ¡Zumbido!
Empezaron a vibrar.
-A: ¡Emoticón de “XD”!
Buffy salió volando. Parecia cabreado. Sacó dos sables. Empezó a darles vueltas, cortó una cuerda sin querer y un mástil le dio en la cabeza. Nos reimos un rato. Se levantó del suelo con una lagrimilla en el ojo derecho.
-B: Te vas a enterar de lo que vale un peine.
-A: Pero, ¿dónde? Es que depende de donde lo compres es más caro a más barato.
-B: Pues no sé en El Tajo Guiri quizás, que tienen que ser muy caros.
-A: Sí, no sé. También depende del tamaño.
-L: ¿A qué viene este off topic? Continuad.
-A: ¡Mail en cadena “Niño sordomudociegomancocojotuertodelpp necesita dinero para curarse”!
Iba directo a Buffy, pero con un sablazo lo desvió. Salió corriendo cogió a Ani-chan, le estaba a punto de clavar un sable en el estomago. Tenía que hacer algo.
-L: Ani-chan, loca, ¿cómo se te ocurre disfrazarte con una falta tan corta? Se te ve todo.
Ani-chan miró hacia abajo, se puso roja.
-A: ¡Kyaaaaahhhhh!
Buffy volvió a salir disparado, pero esta vez se chocó contra un cañón, que se giró y se disparó. Un enorme agujero que atravesó todo el barco. El barco empezó a inundarse.
-E: Tocado y hundido, ¡es como hundir la flota!
-K: ¡La puerta de salida se ha abierto!
-A: Eso quiere decir que… ¡he ganado!
El barco empezó a inclinarse.
-L: Corred tenemos que salir de aquí, ¡rápido!
Corrimos lo más rápido que pudimos y nos subimos a la pasarela que se dirigía a la puerta de salida. Cuando por fin estuvimos a salvo paramos para descansar.
-E: ¡Buf! ¡Qué bien me sienta el ejercicio!
-A: Pero, ¿y Buffy?
-L: No te preocupes por él, es el enemigo.
-A: Pero yo no quiero que muera.
-L: No morirá, es fuerte.
-K: Pero habiendo comido una de esas frutas…
-L: Sí, no puede nadar.
-A: Se ahogará.
-E: En el fondo del mar, matarilerilerile…
-B: No penséis que moriré tan fácilmente.
Buffy estaba en la pasarela, se dirigía hacia nosotros.
-B: Me he divertido mucho, me ha gustado haberme encontrado con vosotros.
-A: Yo también me he divertido jeje.
-B: Lástima que ya no pueda continuar en la organización.
-K: ¿Y eso?
-B: Cuando uno falla en su misión es expulsado de la organización, pero me da igual, ahora podré continuar con mi sueño.
-A: ¿Tu sueñito?
-B: Sí, yo me voy a convertir en el rey de los piratas.
-L: ¡Qué tengas suerte! La necesitarás.
Una enorme explosión en el barco. Unas extrañas cuerdas salían de uno de los camarotes. Se dirigieron hacia Buffy, él se giró y pudo cortar unas pocas, pero no todas, ya que cada vez venían más. Estaba completamente atado.
-L: ¿Qué ocurre aquí? ¿Qué son todas estas cuerdas?
Buffy comenzó a llorar.
-B: Nadie abandona la organización. Cuando no se cumple una misión, te eliminan.
-A: Pero si nos acabas de decir que te expulsaban.
Las cuerdas empezaron a bajar hacia el barco, el cual ya estaba completamente sumergido.
-K: Si nos has dicho que tenías un sueño por cumplir.
-B: Os mentí, me engañé a mi mismo, pero mi sueño jamás se cumplirá… jamás se cumplirá porque ahora voy a morir.
-L: No podemos permitirlo, ¡ayudémosle!
Pero… nos fue imposible, no pudimos ni siquiera acercarnos un poco a él, sólo pudimos contemplar como las cuerdas le empezaban a meter dentro del agua, como él intentaba soltarse inútilmente, como chillaba, como sus gritos histéricos clamaban sobrevivir a un destino que ni él ni nosotros aceptábamos. Su rostro agonizante fue lo último que pudimos ver antes de que las negras aguas le hicieran desaparecer.
Pasamos a la siguiente habitación, asustados, tristes, llorando por una injusticia. No podía ser, no tenía que morir nadie, la situación se me había escapado de las manos, tenía que hablar con ella, sólo ella me podía decir qué había pasado, por qué no ocurrían las cosas como tenían que ocurrir, quién estaba detrás de todo esto, sólo ella lo sabía, sólo ella me lo podía decir.
Entramos en la sala de descanso, una ciudad de setas.
CONTINUARÁ

KUMIAI 9ª parte: La Fruta Gili Gili

Abrimos la puerta a lo desconocido, ¿qué nos esperaba a partir de allí?

Llegamos a una extraña habitación, bueno, más que una habitación, parecía una especie de gruta que se abría al mar. Entre la puerta de entrada y la de salida había un barco, un barco pirata que se unía a las puertas mediante dos pasarelas. No hace falta decir que el resto era todo agua, un océano inmenso. Nuestras ropas de repente empezaron a cambiar. El cambio fue espectacular. Íbamos vestidos con ropa de calle, normal (sí, les había convencido) y ahora íbamos de piratas.

-Elegancia: Id con cuidado de caeros, que nadáis peor que las piedras.

-Karoru: ¡Oye! Que yo nado decentemente.

-Ani-chan: ¿Y tú, nadas bien?

-E: Sí, hice natación sincronizada. Me llamaban la “ballena asesina”.

-A: ¡Jajaja! Te llamaban gordita.

-Litos: Yo me preocuparía más por lo de “asesina”. Dejaos de tonterías. Supongo que en el barco nos espera un enemigo, así que os toca a una de vosotras bajar.

-K: ¿Y por qué no bajas tú?

-L: Soy el cerebro del equipo.

-A: Es verdad, lógica aplastante.

-E: Ani-chan, nos está llamando tontas.

-A: ¿Qué? Jolines, siempre igual.

Esperamos un rato antes de bajar, estábamos esperando a ver si el enemigo daba señales de vida. Pero no ocurría nada, no sabía cuanto tiempo llevábamos esperando, los relojes habían desaparecido, pero por la posición del sol parecía que todavía no era mediodía. Sí, habéis leido bien, encima de nosotros estaba el sol. Cada una de las salas, todas y cada una de ellas, eran zonas donde el tiempo y el espacio estaban desfigurados. Os he dicho que era una sala, pero no tenía pinta de serlo, no sólo estábamos rodeados de agua por todas partes, encima de nosotros estaba el cielo en el cual volaban algunas gaviotas.

-L: Llevamos mucho esperando. Lo mejor será bajar al barco.

-A: ¡No! Me da miedo.

-K: A mí me da más miedo la pasarela, no quiero caerme, soy muy torpe.

-E: ¡Aisss, mi niña! Que en vez de equilibrio tiene un manga yaoi...

-K: Sí, lo más probable.

-L: ¡Venga! No os entretengáis.

Cruzamos poco a poco, Ani-chan y Karoru, que iban delante de mí, iban agarradas a Elegancia. Elegancia no paraba de manosearlas, lo que hacía que la pasarela no parara de moverse y que más de una vez estuviéramos todos a punto de caernos al agua.

-A: ¡Jooo! ¡Para! ¡Nos vamos a caer de la pasarela!

-E: Pasarela, sí, como en Cibeles y Gaudí, naaa nanananaaa...

Elegancia se adelanto a nosotros, se movía como una modelo. Llego al final, pero no se bajó, puso una postura chunga, se dio la vuelta y llegó otra vez a la puerta, no sin antes casi tirarnos al agua. Bajamos de la pasarela y esperamos en el barco, estábamos en la parte de popa. Elegancia volvía haciendo otra vez de modelo. Volvió a hacer otra pose chunga al final de la pasarela. Estaba a punto de volver otra vez a la puerta.

-L: ¡No vuelvas a la puerta! Nos haces perder mucho tiempo.

-E: ¡Jooo! Siempre me cortáis el rollo. Por cierto, iba a pasar a la habitación anterior, porque soy tan vergonzosa que no quiero que me vean las braguitas y…

-K: Sí, claro, tú eres vergonzosa.

-L: Bueno, termina de contarlo.

-E: Pues eso, iba a pasar a la habitación anterior, porque soy tan vergonzosa que no quiero que me vean las braguitas y claro, no es que lleve ropa para cambiarme, porque todo nos lo hemos dejado, pero al menos quería carbiarme un poco, no sé, despeinarme, ponerme las bragas por encima de los pantalones…

-A: ¿Pero no has dicho que eras muy vergonzosa y que no querías enseñar las braguititas?

-L: ¡Calla! Ahora volverá a empezar desde el principio.

-E: Yo no hago esas cosas. Pues eso, iba a pasar a la habitación anterior, porque soy tan vergonzosa que no quiero que me vean las braguitas y claro, no es que lleve ropa para cambiarme, porque todo nos lo hemos dejado, pero al menos quería carbiarme un poco, no sé, despeinarme, ponerme las bragas por encima de los pantalones, vamos, que quería cambiarme un poquillo, y voy, y no puedo abrir la puerta, que no podemos volver a atrás, sólo podemos avanzar.

-L: Eso es lo lógico.

-K: Tanto rollo para nada.

-A: Jejeje, Elegancia eres rarita.

-L: ¡Cuidado!

Nos apartamos corriendo, una bala de cañón pasó a nuestro lado.

-¡!: ¡Ups! ¡Perdón! Quería encender la vela y al final he acabado encendiendo la mecha.

-K: ¡El malo!

-E: Bien, empieza la acción.

-¡!: ¡Uy! Esperad que bajo.

Empezó a bajar por las escaleras, pero se tropezó y la mitad de los escalones los bajó de morros. Nos reimos un rato de él.

-A: ¡Qué tontín!

-K: Menudo inutil.

-L: ¿Quién eres? ¿Qué quieres?

-E: ¡Hola! Me llamo Elegancia y quiero miles de follamigos.

-L: No te lo preguntaba a ti.

-Buffy: Yo no soy Elegancia, soy Donkey T. Buffy, bueno, no soy Donkey T. Buffy, no es mi nombre, Donkey T. Buffy es sólo mi nick, es decir, mi seudónimo.

-L: Un momento acabo de tener un Déjà vu, esto ya lo he vivido.

-E: Yo también.

-A: ¿Quién sería tan tonto como para decir eso?

-E, L y K: Tú.

-A: Jo, como os pasáis, yo nunca he dicho eso.

-L: Sí que lo has hecho.

-B; Bueno, es lógico que me llame tonto, me comí una fruta del diablo.

Ani-chan, Karoru y yo empezamos a correr alejándonos de él al saber la peligrosidad de dichas frutas.

-E: ¿Por qué corréis?

-K: Las frutas esas dan unos poderes raros que pueden llegar a ser muy peligrosos.

-B: Jejeje, que bien lo sabéis.

Se dirigió hacia nosotros, pero cayo en una de las trampas que el mismo había preparado en la cual había un cartelito que ponía “esto no es una trampa, podéis pisar tranquilamente, jojojo”.

-L: Estooo, ¿podrías decirnos cuál es la fruta que has comido?

-B: Si no hay más remedio. Me comí la fruta Gili Gili (la “Baka Baka no Mi” en japonés).

-K: Pues debe ser la única que no sirve para nada.

-L: Vamos que con esa fruta te vuelves más tonto que las piedras.

-B: Joo, ya vale, no os cebéis conmigo, que yo sólo había venido a mataros.

-L: Bueno, ¿Quién va a luchar contra él?

-E: Prefiero esperar a otro un poco más difícil.

-A: Yo es que quería jugar un rato al Mario 65.

-E: A ver, Uva-chan, te han dicho que se llama Mario 64.

-A: Es que creo que yo soy de letras.

-K: ¿Quién le puso el mote de Uva-chan?

-L: Si no recuerdo mal fui yo, se lo puse porque siempre está en la parra, como las uvas. Como tú también estás un poco en la parra juntas formáis el Racimo Club Ani-chan la presidenta y fundadora y tú la vicepresidenta y cofundadora.

-K: ¡Ah! Gracias por meterme en su mismo grupo, no sabes cuanto te lo agradezco.

-E: Claro, se te pone en el mismo porque no te podemos llamar Uva-chan, tú eres Yaoi-chan.

-K: Me estoy cansando de tanto mote.

-L: Bueno, me parece que para este enemigo tendremos que enviar a alguien del mismo nivel.

-K: Sí, con eso sobrará.

-E: Me divertiré viendo el combate.

-A: Sí, jeje, ¿quién irá?

-K, E, L: …

-L: ¡Ani-chan, lucha con todas tus fuerzas!

CONTINUARÁ

KUMIAI 8ª parte: Mayoría de Kuroko

-¿¡!?: ¡Bienvenidos! Os esperábamos.

-Ani-chan: ¡Bieeeennn! Sabía que era una fiesta.

-Karoru: Tú es que no te enteras, que estamos atrapados.

-Elegancia: Tranquilos que aquí estoy yo para cargármelos a todos.

-¿¡!? No creo que puedas, pero bueno, a ver… un, dos, tres… faltan dos…

-Litos: No, sólo falta uno.

Me aparte de la pared y me puse debajo de los focos, junto a mis tres compañeras.

-L: ¡Cuánto tiempo sin vernos, chica de la farmacia!

-¿¡!?: No me llames chica de la farmacia.

-L: ¿Y cómo debería llamarte?

-¿¡!?: ¡Cómo quieras!

-E: Vale. Le llamaremos Anisdelmono.

-K: Pues yo preferiría llamarle Haruhi Suzumiya.

-A: Es mejor Apple, como la novia de Mario.

-L: La novia de Mario se llama Peach.

-A: Frutita equivocadita jeje.

-¿¡!?: Bueno, ahora da igual, llamadme Sakura.

-K: Ualaaaaa, ¡Qué friki!

-A: Es verdad, se ha puesto un nombre japonés.

-L: ¡Quítatelo! Eso es un insulto a las Clamp.

-Sakura: ¿Qué pasa? Yo me pongo el nombre que quiero.

-L: Pues no, a partir de hoy te llamarás Kuroko. Votación. ¿Quién quiere Kuroko?

-L, A, K y E: ¡Yo!

-L: ¿Quién quiere Sakura?

-Kuroko: ¡Yo!

-L: Mayoría de Kuroko, te quedas con Kuroko.

-Ku: ¡Vaya mierda de votación!... ¡Ya me habéis liado! No habéis venido a cambiarme el nombre.

-K: No, claro que no.

-L: Ha caido una verja detrás de nosotros, así que supongo que no podemos volver hacia atrás, sólo podemos avanzar.

-Ku: Muy observador. Será como un juego. Tendréis que ir avanzando de sala en sala venciendo a vuestros oponentes hasta llegar a nuestro jefe. Sólo habrá dos opciones, o pasáis a la siguiente sala o seréis eliminados, y cuando digo que seréis eliminados, me refiero a que os matarán.

-E: ¡Uala! ¡Qué giro argumental!

-K: Es como un shounen o como un videojuego.

-A: ¿Y cuántas vidas tenemos?

-L: Una, sólo una. Una pregunta: ¿si muere uno del grupo se puede continuar sin él?

-Ku: Por supuesto, si uno de vosotros vence a vuestro oponente, podréis pasar.

-L: Perfecto.

-Ku: Antes de que paséis a la siguiente sala y empecéis el juego, tenéis que cambiaros de ropa. También tenéis preparada la mesa, podéis comer todo lo que queráis.

-L: No entiendo. ¿Por qué os tomáis tantas molestias? Somos el enemigo.

-Ku: No lo sé, son órdenes del jefe. Podéis coger todas las provisiones que queráis, pero sólo ahora os saldrán gratis, después, entre enemigo y enemigo, habrá una sala de descanso, en la cual podréis dormir para recuperar fuerzas, comer, comprar cosas que necesitéis, podéis hacer lo que os de la gana, eso sí, todo os va a costar dinero.

-E: Pues yo me he dejado la cartera en la furgoneta. No tengo ni un euro.

-Ku: No hace falta, aquí no utilizaréis euros, utilizaréis una moneda especial.

-L: Sigo sin entenderlo, ¿por qué tu jefe nos mete aquí dentro, no nos deja salir, nos mete dentro de un juego y nos da todas las comodidades? ¿Cuál es su objetivo?

-Ku: Ya te lo he dicho, no lo sé, pero quizas, cuando ganéis a algún enemigo, este os dé alguna pista.

-L: No me convence la explicación, pero acepto el reto.

-E: Yo también, necesito acción.

-K: Y yo, ahora mismo no tengo nada mejor que hacer.

-A: Vale, jeje, yo también, jeje.

-L: Tengo una última duda.

-Ku: Supongo que es sobre tus otros compañeros.

-L: Sí, ¿qué ocurrirá con ellos cuando entren?

-Ku: Nada. Les recibiré yo, igual que os he recibido a vosotros.  Les explicaré lo mismo que os he explicado. Como vosotros habréis eliminado a todos los enemigos, sólo tendrán que alcanzaros, sin luchar contra nadie, será fácil para ellos.

-K: Jo, sabía que tenía que llegar tarde, como siempre, así me sería más fácil y no tendría que hacer nada.

-A: Mira que eras vaguita.

-K: Si yo te dijera lo que tú eres.

-Ku: Bueno, os dejo mientras os preparáis, quizas nos volvamos a ver.

-L: ¿También nos enfrentaremos a ti?

-Ku: A lo mejor, como ya os he dicho, es el jefe el que decide. ¡Nos vemos!

Nos empezamos a preparar.

-E: ¡Cuánta ropa! Aunque mucho de lo que hay parecen disfraces.

-K: Pero disfraces de calidad, las telas son buenas.

-A: ¿Y tú cómo sabes eso?

-K: Porque he ido disfrazada al salón del manga.

-E: ¿Y de qué fuiste?

-K: De una serie llamada Prince of Tennis.

-A: ¿De toda la serie?

-K: … ¿Lo haces a propósito?

-A: ¿El qué?

-K: ¿Cómo voy a ir de toda la serie? Iba del prota.

-E: ¿Te costo mucho?

-K: ¡Qué va! Coges una gorra y una raqueta y ya está, eres el prota.

-E: Ya veo, supercurrado.

-A: Mira, ¡qué cuquito! Un disfraz de pikachu.

-E: Aquí hay uno de monja y si te pones debajo el traje de sadomaso te queda de puta madre. Ani-chan, vamos a probártelo.

-A: Jopetas, no, ese no, que no me gusta.

-E: Es muy difícil complacerte.

-L: No perdáis más el tiempo, no tenemos toda la noche… bueno, sí que la tenemos… venga, deprisa.

Cada uno se metió en un probador, la verdad, esa sala era grande, muy grande y tenía muchas cosas, demasiados lujos para nosotros, que eramos el enemigo. Salí el primero del probador.

-L: ¡Qué es para hoy!

-E: Ya estoy, dispuesta para arrasar.

-K: Yo también estoy.

-E: Estás divina Karoru.

-K: Gracias.

-E: ¿Y?

-K: ¿Cómo que y?

-E: ¿Y qué más?

-K: ¿Muchas gracias?

-E: Noooooo, tienes que decir “tú también estás divina Elegancia”.

-K: Paso.

-E: Todos sois muy fríos conmigo.

Esperamos 10 minutos más y Ani-chan seguía sin salir.

-L: ¿Ani-chan? ¿Sigues viva?

-A: Sí.

-K: ¿Por qué no sales?

-A: Es que…

-K: ¿Es que qué?

-A: Me da vergüenza.

-L: Elegancia, ve.

-E: ¡Yuhuuuuu!

Elegancia salío corriendo hacia el probador donde estaba metida Ani-chan, rompió la cortina, agarró a Ani-chan, se la colgó del hombro, volvió y dejo a Ani-chan sentada en una silla.

-K: Venga, a cenar.

-A: ¡Umm! ¡Qué riquito!

-E: Esta que te mueres.

Comimos todo lo que pudimos, todo lo que sobró lo guardamos como provisiones (no, no es aprovecharse, os recuerdo que nos lo dieron y además, ¡es gratis!).

-E: ¡Bufff! Estoy superllena.

-A: Bueno, jeje, lo mejor para bajar la comida es una corrida.

-E, L y K: …

-E: Lo sabía, tú eres de las mías.

-A: ¿Eh? ¡Oh! No, no, no. Me refiero a corrida de correr.

-L: Ani-chan… eso se dice carrera…

-A: ¡Ah! ¡Ups! Un errorcito, jeje.

-L: Bueno, corramos, ejem, un tupido velo. ¿Estáis preparadas?

-E: ¡Síííííííííííí! Estoy nerviosa, necesito acción, ya.

-A: ¿Por qué no lo dejamos para otro día? Empiezo a tener miedo y Elegancia se me pega mucho.

-K: ¡Uy! Yo paso, me da palo. Me veo venir que la vamos a espichar todos y, la verdad, la idea no me mola.

-L: Perfecto, todo preparado, ¡vamos!

Abrimos la puerta a lo desconocido, ¿qué nos esperaba a partir de allí?

CONTINUARÁ

KUMIAI 7ª parte: Unos 5 Minutos

-Litos: ¡Hola! Veo que estáis todos. Encantado, Soy Litos.

-Vege: Encantado, soy Vege.

-Elegancia: ¿Cómo que Vege? ¡Ikemen! ¡MI IKEMEN!

-Ani-chan: Jopetas, no me dejáis escuchar mi ND6.

-Karoru: ¿ND6? ¿Qué es eso? Y, por cierto, ¿qué haces vestida de rosa?

-A: Jo, Karoru, hay que explicártelo todo. Un ND6 es este aparatito que hace… bueno, ya deberías saberlo.

-V: Ani-chan, eso es un MP3.

-A: Jopelines, si es que siempre le cambian el nombre a las cosas.

-K: No, eres tú, que no te lo sabes. Respóndeme a la otra pregunta, ¿qué haces de rosa?

-E: ¡Me aburro! ¿Jugamos al juego de la botella?

-A: Jolín, Karoru, no te enteras. Voy de rosa porque Litos dijo que teníamos que venir vestidos de rosa.

-L: No, yo dije que teníais que venir vestidos de negro.

-A: Jo… Seguro que lo hacéis a propósito para que parezca que soy tonta.

-K: Si tu lo dices…

-E: Me aburro. Vege, dame un besito.

-V: No, gracias.

-E: Eres muy frío conmigo.

-V: Pobrecita.

-K: ¡Oye! ¿Falta mucho para llegar?

-L: No mucho, unos 5 minutos.

-A: ¡Uy! Pues yo pensaba que estaba superlejos, vamos, que estaba en la quinta cunte.

-L, E, V, K: …

-V: Estooo… ¿Estaba en el quinta cunte?

-A: Sí, ¿no sabéis que significa? Significa que estaba muy lejos.

-K: No, que estaba muy lejos se dice “estaba en el quinto pino”.

-E: No, se dice “estaba en el quinto coño”.

-L: Además, te equivocas de palabra, no es quinta cunte, es Kunta Kinte.

-E: Ani-chan, ven aquí, que te voy a quitar la tontería de un tortazo.

-A: ¡Ay! ¡No!

-L: ¡Tápale la boca! ¡Qué no chille!

-A: No tranquilos, si no voy a chillar. Parece como si siempre chillara por cualquier tontería.

-K: Es que chillas por cualquier tontería.

-V: ¿Ya tenéis planeado lo que haremos cuando lleguemos a la farmacia?

-A: ¿Farmacia? ¿Pero era hoy? Yo creía que ibamos al cine.

-K: ¡Buff! Yo estoy cansada, creo que voy a pasar.

-E: ¡Acción! ¡Necesito acción!

-V: Bien, veo que lo tenéis todo planeado.

-L: Sí que lo tenemos. Nosotros cuatro estraremos, tú Vege, te quedarás en el coche esperando a que salgamos, pero si tardamos más de una hora vas a tener que entrar a buscarnos.

-V: Vale, me va bien.

-E: Jo, yo me quiero quedar con mi Ikemen.

-K: Vege, veo que Elegancia te ha cogido cariño.

-V: ¡Uff! No veas lo que me alegra escuchar eso…

-L: Bueno, mientras le empreñe a él, no nos molesta a nosotros.

-K y A: ¡Perfecto!

-V: Yo no lo veo tan claro.

-E: Es que es tan guapo.

-A: Jejeje, estáis todos locos, perdéis aceite.

-E, L, D, y K: …

-K: ¡Oye! Vale ya de llamarme lesbiana, que sólo me gusta el yaoi.

-A: Jopetas, si no te he dicho nada de eso.

-V: ¿Qué crees que significa perder aceite?

-A: Perder aceite significa estar loco, ¿no?

-L: No, perder aceite significa ser homosexual, estar loco se dice “te falta un tornillo”.

-A: ¡Valeee! Ya decía yo que tenía que ver con el motor de un coche.

-E: Y se queda tan tranquila la muy cabrita.

Karoru se puso seria, luego puso cara chunga y luego empezó a babear.

-K: ¡Huelo a gay! Hay dos y están cerca.

-V: No voy a parar el coche para que hagas de mirona.

-K: ¡Pues me tiro!

-L: Karoru, si te tiras del coche en marcha, te harás daño y posiblemente sangres.

-K: ¡Uy! Pues ahora que lo dices…

-L: Además si te tiras aquí, no creo que sepas volver a tu casa.

-K: ¡Uy! ¡Qué miedo! Entonces mejor, no me tiro…

Volvió a poner cara chunga, pero esta vez, todavía más chunga.

-E: ¿Qué te pasa? ¿Quieres que te de un buen morreo?

-K: No. Me he olvidado de algo vital.

-A: ¿El qué?

-K: Que hoy dan mi serie favorita, Queer as Folk, y no voy a llegar a verla… ¡Y tampoco he programado el vídeo! ¡Es el fin del mundo!

-V: Por un capítulo no creo que te pase nada.

-K: ¿Cómo que no? Si me lo pierdo nunca más podré volver a ver la serie… ¡Y con lo que me gusta!

-A: Tranquila jeje, dentro de un par de años, seguro que los repiten, como hacen con todas las series.

-K: ¡Ah! Muchas gracias. Eso me consuela que no veas.

-L: Bueno, dejemos el tema. Ya hemos llegado, es hora de entrar. ¿Tenéis todo preparado?

-E: Sí, condones y todo el licor de la tienda a la que he ido. ¡Ah! También he traido una linterna.

-A: Yo me he traido la DS, el cargador, los Cd’s de música y patatillas y esas cosas, jeje.

-K: Yo me he traido los bocatas que me ha hecho Mamá y nada más, que me daba mucho palo traerlo.

-L: Una cosa, ¿pensábais que nos ibamos de excursión?

-K, E y A: Sí.

-V: Vamos apañados.

-L: Tranquilo, yo sí que venía preparado.

-V: Sí, yo también he traido un par de cosas por si eran necesarias. Están en el maletero, ahora te las enseño.

-L: Sí, vamos bajando ya, que es casi la hora de entrar.

Miramos lo que había traido Vege. Cogimos algunas de las cosas y las metimos en nuestras mochilas (o bandoleras o bolsos o lo que lleváramos para llevar los trastos).

-K: ¡Oye! Eso son unas cartas del Uno, ¿no?

-V: Sí, las he traido por si eran necesarias.

-L: Hombre, no creo que nos hagan falta.

-V: Bueno, no pasa nada. Me las quedo yo y voy jugando en el coche.

-L: ¿Solo?

-V: Sí, yo solo, ¿por?

-L: No, por nada. Elegancia, abre la puerta.

-E: ¡Valeeeeee!

Elegancia pegó una increible patada a la puerta, que se hizo trocitos.

-L: Te dije que la abrieras, no que te la cargaras. Bueno, Vege, vamos entrando, si no venimos en una hora, ya sabes lo que tienes que hacer.

-V: Sí, tranquilo. ¡Hasta luego!

Fuimos entrando en la farmacia. Mire a la furgoneta, Vege estaba jugando solo al Uno, parecía que iba perdiendo. ¡Lástima! Para uno que parecía normal. Entré.

-A: ¡Jo! ¡Qué oscurito! ¡Tengo miedo!

-E: Tú agárrate a mí. Yo te protegeré.

-A: ¡Jopetas ya! Me agarro a ti, pero tú no hace falta que me agarres las tetas.

-E: Era por si se te habían perdido.

-K: La verdad es que está farmacia parace muy grande, llevamos más de un minuto andando y no hemos llegado al fin.

-L: Silencio. Quietas.

Una verja cayó detrás de nosotros. Yo iba más atrás y me pegué a una pared. Unos focos les alumbraron. Estabamos en un sitio enorme, ¿cómo habíamos llegado allí?

-¿¡!?: ¡Bienvenidos! Os esperábamos.?

CONTINUARÁ 

KUMIAI 6ª parte: Globos Aerostáticos

-Litos: ¡Hola! ¡Buenos días!

-Dependienta: ¡Hola! ¿Qué desea?

-L: Mire, tenía una pregunta que hacerle. Soy el encargado de esas tres chicas que están en la puerta de la farmacia. Supongo que ya se habrá dado cuenta de que son internas del centro psiquiátrico y hoy me ha tocado estar a su cargo. Lo cierto es que no tengo coche y no sé que autobús lleva hasta dicho centro, ¿sabría decirme cual es?

-D: Me sabe mal, pero la verdad es que no sé cuál autobús lleva hasta allí.

-L: ¡Ufff! Es que, la verdad, estoy reventado. Todo el día con ellas para arriba y para abajo, es cansadísimo. Siempre estás en tensión para que ninguna se te escape.

-D: ¿Y lleva todo el día?

-L: Sí, pero por suerte es sólo un día al mes.

-D: Menos mal, pero, ¿alguna de ellas es familiar suyo?

-L: No, claro que no, soy un voluntario de la Cruz Magenta.

-D: ¡Oh! ¡Qué buena persona!

-L: Sí, lo sé. Yo que he tenido tanta suerte y que soy perfecto tengo que ayudar a los más desfavorecidos.

-D: ¡Qué buena persona! ¡Qué suerte! Yo no he tenido tanta suerte en la vida.

-L: Cuénteme, ¿qué le ocurrió?

-D: La semana pasada fui al casting de Operación Triunfo y no me cogieron. Tanto practicar todas las noches y al final me salió rana.

-L: ¿Le salió rana? Pues tendría que haberle dado un besito y se hubiera convertido en un príncipe, pero claro usted no ha presentado el telediario de la 1ª, así que tendría pocas posibilidades con él

-D: Si ya lo digo, hay gente que nace con suerte y otros sin suerte.

Miré para atrás en el momento justo. Me dio tiempo de taparme los oidos antes del gran estallido.

-Ani-chan: KYYYYYYAAAAAAAAAAAAHHHHHH!!!!!!

Todos los cristales de la farmacia se reventaron, las botellas explotaron, los condones se hincharon y empezaron a flotar como un cielo lleno de globos aerostáticos. Lo peor que le podía pasar a Ani-chan le había ocurrido, se le había terminado la batería a la DS.

La dependienta estaba desmayada en el suelo, el momento perfecto para irme, sin que ella extrañara no encontrarme. Había tenido tiempo de sobra de mirar todo lo que quería y gracias a Ani-chan podía irme sin entretenerme.

-L: Os dije que no llamarais la atención.

-Karoru: Menos mal que ya me habían avisado, si no, ahora estaría desmayada en el suelo y con lo que no duermo me habría quedado hasta mañana durmiendo.

-Elegancia: Bueno, y ahora, ¿qué hacemos? ¿Vamos a ver una peli porno?

-A: ¡Jope! Ahora que había llegado al final.

Dentro de la farmacia la dependienta se despertó. Se quitó el polvo y los condones que habían aterrizado en su cabeza.

-¿?: Te dije que fueras con cuidado.

-¿¡!?: Lo sé, y estaba alerta. Pero no me esperaba un ataque tan repentino y tan devastador.

-¿?: Bueno, eso ahora no importa. Lo importa es que hemos comprobado que, como nos habían informado, estan buscando una farmacia para dar el golpe.

-¿¡!?: Sí, y no se esperan que cuando vayan a robar les estaremos esperando.

-¿?: Cuanto antes terminemos con ellos, antes conseguiremos nuestro objetivo.

-¿¡!?: Pero no ha servido de nada secuestrar a algunos de sus miembros, ni se han inmutado. Todos los miembros retenidos ya han sido liberados.

-¿?: Espero que les hayais borrado la memoria.

-¿¡!?: Sí, por supuesto, no recuerdan nada del secuestro. Y seguro que también vendrán el día del robo.

-¿?: Pero hay algo que no llego a entender, ¿por qué no se han preocupado por sus compañeros? Seguro que ni saben quienés son los que han desaparecido, ¿tan poco les importan?

-¿¡!?: Todos tenemos un orden de prioridades y la suya es ir a Japón.

-¿?: ¿Habéis investigado a todos los miembros?

-¿¡!?: Sí. Entre ellos hay: uno que no se entera, uno que pasa, una despistada perezosa, una ninfomana violenta, una ludópata alcohólica…

-¿?: Vale, vale, información más que suficiente. Pero no me has nombrado al que ha entrado en la farmacia.

-¿¡!?: Parece que es el único que desmuestra su inteligencia e intenta sacar partido de todo lo que puede. Embauca a todos, pero sobre todo se mueve en las sombras y mueve los hilos desde detrás. ¡Ah! Y se me olvidaba, tiene contactos.

-¿?: Bueno, no sólo él ha dicho una mentira, tú también la has dicho, no has ido a ningún casting de Operación Triunfo.

-¿¡!?: Sí que he ido y no me dejaron ni cantar ni 5 segundos.

-¿?: … ¿Fuiste? … ¿Y qué cantaste?

-¿¡!?: Eso ahora no importa.

-¿?: ¿Tan horrible es?

-¿¡!?: Sí, pero eso ahora no importa.

-¿?: Sí, lo sé, lo importante ahora es que los tenemos donde queríamos y morirán aplastados como cucarachas. ¡JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA!

Dio un fuerte pisotón y chafo algo. Algo que él sabía que tenía que chafar. La vieja que entraba por la puerta de la farmacia se asustó y volvió a salir.

Me quité rápido los auriculares, habían descubierto el micrófono que había puesto para escuchar todo lo que ocurría dentro de la farmacia. Lo tenía todo calculado, pero en mis planes no entraba que nosotros podíeramos recibir un ataque por sorpresa.

-L: Bueno, decidido iremos a la farmacia del hermano de Ani-chan.

-A: Jo, no vale, siempre igual.

-E: Oye, Litos, ¿quién te ha dicho que en la farmacia se ganaba mucho dinero?

-L: Un amigo, bueno, una amiga que trabaja conmigo.

-K: ¡Uy! ¿Y de qué trabajas?

-L: Trabajo en una farmacia.

-K, E, A: …

-A: Jopelines, ¿Y por qué no vamos a robar a la farmacia donde trabajas tú?

-L: Venga, ¿vamos a comer a algún sitio?

-K: Sí, que ya me estaba muriendo de hambre.

-E: Conozco un japonés buenísimo.

-A: Oye, petardos, ¿me estais escuchando?

Mientras hablábamos de donde podíamos ir a comer, miré hacia atrás. La farmacia había desaparecido y en su lugar había una finca de pisos.

La noche del robo llegó. Durante esa semana había hecho unas cuantas llamadas de vital importancia. También llamé a Arashi y me dijo que llegaría un poco más tarde. Me habían dicho que me vendrían a buscar y yo estaba en el sitio indicado esperándoles. Llegaron todos en una furgoneta roja y con más luces que la feria de abril. Dentro estaban Karoru, Ani-chan, Elegancia y otro de los miembros del foro, llevaba el kanji en una gorra.

-Litos: ¡Hola! Veo que estais todos. Encantado, soy Litos.

CONTINUARÁ

KUMIAI 5ª parte: La Osa Pérez

-Litos: ¡Hola Elegancia, Ani-chan! ¡Hola! ¿Qué tal? Soy Litos. ¿Tú eres...?

-Elegancia: ¡Hola Litos! ¡Estoy llena de energía!

-Ani-chan: ¡Hola! Jeje, bueno, ¿dónde quereis ir? Una heladería estaría bien, ¿no?

-L: Estooo… no hemos quedado para ir a tomar algo, hemos quedado para ir a investigar un par de farmacias.

-A: ¡Ostras! Elegancia eres una gilipepas, anda que me avisas, creía que habíamos quedado para ir a tomar algo.

-Karoru: ¡Ufff! ¡Qué palo! Pues espero que no estén muy lejos.

-L: ¡Uy! Pero si habla, ¿cómo te llamas? ¡Qué antes no me has respondido!

-K: ¿Tengo que presentarme? Me da palo… ¡Hola! Soy Karoru… y ya.

-E: Tú eres Karoru…chan y punto.

-L: ¿Por qué hay tanto espacio entre Karoru y chan?

-E: Porque tarda mucho en pillar las cosas.

-K: ¡Oye! ¡Qué eso no es verdad!... Bueno, sí que lo es… Pero no tardo tanto como Ani-chan.

-A: ¿Eh?

-K: No, nada importante.

-A: ¡Ah! Vale, yo sigo con lo mío.

-E: ¿Se puede saber qué haces?

-A: Estoy jugando a la consola.

-L: Está jugando con la DS.

-A: ¡Oye! ¡Qué es mía!

-L: ¿Y quién ha dicho que no sea tuya?

-A: Has dicho que estaba jugando con la de ese, y no es de ese, es mía.

-K: Ani-chan… la consola, se llama DS.

-A: ¡Ostris! ¡No lo sabía! Bueno, yo continuo.

-L: ¿A cuál juegas?

-A: Al Mario 69.

-E: ¿Quééééé? Hay un juego de eso y yo no me lo he comprado ¡ajjjjjj!

-K: Ani-chan… ¿no te estarás refiriendo al Mario 64?

-A: ¡Uy! Jeje, sí, a ese, jeje… yo continuo.

-L: … Ufff… ¡Qué susto me ha pegado la jodida! Bueno, CAMBIO DE TEMA, ¿a cuántas farmacias podemos ir hoy?

-K: ¿Qué? ¿Hay que ir a más de dos?... Me da palo.

-L: Tú… eres muy perezosa.

-A: ¡Jajajajaja!

-E: ¿Eh? ¿Qué pasa?

-A: Perezosa, ¡jajajaja!

-K: ¿Eh? ¿Dónde está la gracia?

-A: Perezosa, jajajaja, la Osa Pérez, jajajaja.

-L, K, E: …

-A: Y es hermana del Ratoncito Pérez, jajajaja.

-L, K, E y todas las personas que estaban en la plaza de España: . . . . . .

-L: Eso es biológicamente imposible, por mucho que ambos sean mamíferos son demasiado distintos genéticamente, así que es imposible que sean hermanos, parientes lejanos, sí, porque ambos vienen del mismo antecesor, pero hermanos, no, eso es imposible.

-K, A, E: …

-A: Jo, ¡Qué complicado! ¿No?

-K: Me he perdido… eso es muy complicado para mí.

-E: Yo de esas cosas no entiendo ¡Sexo! ¡Quiero sexo!

-L: Bueno inútiles… quiero decir… mis únicas e incomparables compañeras… vamos ya hacia la farmacia.

La farmacia más próxima estaba muy cerca, nos paramos en la entrada para poder seguir hablando allí, antes de que uno de nosotros se metiera dentro.

-L: Mejor será que sólo uno de nosotros entre dentro, por cierto, Karoru, tu camiseta es chula.

-K: ¡Ah! Gracias, también tengo otra de un perro cabezón que me regalo una amiga, la verdad, no me gustó mucho, sólo la llevo para limpiar el polvo o cuando quedo con ella para que vea que me la pongo… aisss… si hubiera sido de una escena yaoi la llevaría siempre puesta.

-L: ¿Te mola el yaoi?

-K… ¡SÍÍÍÍÍÍÍÍ! Es lo mejor del mundo ver a dos tíos buenorros dándose el lote ¡Sólo con persarlo ya me excito!

-A: ¡Claro! ¡Cómo eres lesbiana! Bueno, yo continuo con lo mío.

-E: ¿Eres lesbiana? ¡Ven aquí que te voy a comer entera!

-K: ¡Qué no! ¡Qué no soy lesbiana! ¡Qué a mí me gustan los tíos y el yaoi!

-L: Bueno… pero… debe ser muy triste… ¿no?

-K: ¿Triste? ¿Por qué?

-L: Hombre, supongo que los tíos que más te gustan son los del yaoi, ¿no?

-K: Claro.

-L: Y los tíos del yaoi son gays, ¿no?

-K: Por supuesto.

-L: Pues si los tíos que más te gustan son los del yaoi y los tíos del yaoi son gays, no tienes ninguna oportunidad con los tíos que más te gustan.

-K: ¡Ostras! ¡No me había dado cuenta de eso! ¡Jo! Pues sí que es triste…

-L: Y eso sin contar que el yaoi son dibujos y por tanto irreales.

-K: Bueno, también me gustan los gays de carne y hueso.

-L: Bueno… suerte… CAMBIO DE TEMA… Es más que obvio que el que tiene que entrar en la farmacia soy yo.

-E: ¿Por? No es justo yo quería comprarme una caja de condones de sabores.

-K: Yo pasaba de entrar, así que me da igual quien entre, siempre que no sea yo.

-A: ¡Jo! Ya me he vuelto a caer… ¡Venga Mario! ¿Eh? ¿Qué pasa? ¿Por qué me mirais?

-L: Por nada… pues bien… queda decidido el que entra soy yo.

-A: Y además, se ha decidido por unanimidad.

-E: ¿Por unanimidad? Si lo ha decidido él.

-A: Pues eso, como lo ha decidido sólo uno es por unanimidad.

-K: No, unanimidad es que se decide entre todos.

-A: ¡Ah! Pues no lo sabía… ¡Oh! ¡Me han matado! ¡Jo!

-L: Bueno, volviendo al tema principal, el que entrará seré yo.

-E: Venga, vale.

-K: Por mí perfecto.

-L: Procurad no hacer ruido, tenéis que pasar desapercibidas.

-E: OK, ni se nos verá, ni se nos oirá.

-L: Lo dudo mucho.

-K: Es que no confías en nosotras… ¡O Eme Ge!

-E: ¿Qué pasa? ¿Qué pasa?

-K: Un par de gays se han metido en un callejón, a 567 metros hacia el norte, se iban metiendo mano, tengo que verlo.

-E: Me apunto, ¡yuhu!

-A: ¡Salta Mario! ¡Bien! ¡Conseguí una estrella más!

Elegancia y Karoru desaparecieron a la velocidad de la luz, yo me quedé haciendo de niñero, no podía entrar en la farmacia y dejar a Ani-chan sola, no quería que mordiera a nadie. Tres minutos después venían deprimidas.

-K: ¡Jo! Se han dado cuenta de que les mirábamos y se han largado.

-E: Pero tía, ¿cómo no se van a dar cuenta? ¿Dónde guardas tanto líquido? La verdad, me he acojonado, creía que se nos llevaría la corriente.

-K: ¡Jo! Lo siento, es que cuando me excito siempre me pasa.

-L: Bueno, ¿puedo ir a investigar a la farmacia?

-E: Prometemos portarnos bien… o al menos, intentarlo.

-K: Me da palo.

-A: ¡Aj! ¡El malo grande! ¡¿Y ahora qué hago?!

-L: Bueno, investigo un poco y enseguida salgo.

-E, K: ¡Vale! ¡Hasta ahora!

-A: ¡Me ha matado! ¡Jo! ¡No vale! ¡Gilipepas!

Entre dejando a esas tres locas fuera, no esperaba hacer gran cosa, así que decidí hacerlo lo más rápido posible.

-Litos: ¡Hola! ¡Buenos días!

CONTINUARÁ

KUMIAI 4ª parte: ¿chungos? ¡chunguísimos!

-Litos: Diga, soy Litos, ¿Quién es?

-Arashi: ¡Hola! Soy Arashi, ¿Qué tal? ¡Cuánto tiempo!

-L: ¡Oh! ¡Arashi! Sí que hace mucho que no nos vemos. Pues todo bien (para mí), acabo de llegar a casa, había quedado con la gente del foro. ¿Y tú?

-A: ¡Muy bien! Aquí en casa con mi niño y mi niña.

-L: ¿Sabes algo del foro?

-A: Algo lei, desaparece la gente… ¡Yuna! ¡Deja eso!

-Y (se traduce del perruno al castellano): ¡Calzoncilloman!

-A: Espera un momento, que la perra ha cogido algo, un segundo.

-L: No pasa nada, ves y cógeselo.

Mientras esperaba a Arashi decidí empezar a leer el Señor de los Anillos (una lectura corta y ligera), un ratito de nada después terminé de leerlo con un bonito “colorín colorado este tocho se ha acabado”.

-A: ¿Litos? ¿Estás? Perdón, he tardado mucho.

-L: ¡Qué va! Si no me he dado cuenta.

-A: Pues, ¿Por dónde íbamos?

-L: No me acuerdo.

-A: ¡Ay! ¡Esta perra! Si me ve hablando por teléfono tiene que liarla.

-L: No pasa nada, cada perro es distinto, la mía, por ejemplo, se te mea encima, pero sólo a ti, eso es que te aprecia.

-A: ¡Qué bien! La mía lo que hace es romper cosas. El otro día, por ejemplo, deje la tele encendida mientras iba a la cocina a coger un plato y cuando volví la vi cogiendo el mando, cambió de canal y en cuanto salió Ana Rosa Quintana, cogió tal cabreo que se cargó el mando.

-L: La mía no hace esas cosas.

-A: ¡Uy! Pero es que mi perra es muy lista. ¡Hace de todo!

-L: La mía sólo se pone a dos patitas.

-A: Mira, hasta me pinta las paredes.

-L: ¡Ostras! ¿Y cómo lo hace?

-A: A ver, lo primero que necesitas es un tampax utilizado… ¡Yuna! ¡Suelta la bolsa de basura!

-Y: Pero si todavía quedan trozos de carne, ¡Ummm! ¡Qué rico!

-A: Un momentito, ¡Por favor!

-L: Si no pasa nada…

No sabía que hacer durante el par de horas de espera, así que decidí ir a ver la tele, eso sí, me llevé el teléfono que para algo se llama móvil (Ani-chan: “porque se mueve cuando vibra lol”). Hacían “Uuuwa u u, u u”. Sí, lo habéis adivinado C.S.I. Las Vegas. Se terminó y empecé a temer que tendría que ver al cara  poker (“o no han muerto 30 personas” = “que bien me ha tocado la lotería” = “voy a cenar a un chino” = “tres tristes tigres tragan trigo en un trigal”).

-A: Nin, perdona, esta perra es un desastre.

-L: No pasa nada, ya me he acostumbrado.

-A: Bueno, mejor que hablemos de cosas serias.

-L: Sí, mejor. Ya pude hablar con dos miembros del foro.

-A: ¿Y qué tal?

-L: …

-A: ¡Uy! ¿Son mala gente? ¿Son chungos?

-L: ¿Chungos? ¡Chunguísimos?

-A: ¡Qué jiñe! ¿Y cómo son?

-L: ¡Ufff! ¿Cómo los definiría? Muy raros. Tienen unos hobbies todavía más raros: una se dedica a atacar a la gente y a intentar desnudarla y la otra habla con diminutivos y no se suele enterarse de las cosas.

-A: ¿Sólo has conocido a dos chicas?

-L: Sí, pero viendo como son estas, me imagino que todos los otros serán iguales.

-A: Lo mejor será llamar a la policía.

-L: Hablando de robar, ya sé como conseguiremos el dinero para ir a Japón.

-A: ¿Cómo?

-L: Pues robando una farmacia.

-A: Ah… Lógico… ¿Y cuándo habéis quedado?

-L: Hemos quedado mañana para mirar un par de farmacias.

-A: ¿Mañana? Yo no puedo, estoy muy ocupada.

-L: Pues entonces iremos nosotros, miraremos unas cuantas y luego decidiremos. Lo que ya tengo planeado es la fecha del robo, será la semana que viene, el viernes.

-A: ¡Qué pronto! Pues me voy a ir preparando.

-L: ¿Preparando?

-A: ¡Uy! Tú no sabes lo que puedo tardar yo en vestirme, maquillarme…

-L: Bueno, sólo es necesario que vistas de negro y que la ropa sea cómoda.

-A: Vale. Pues iré dando un paseo con la perra hasta esa farmacia.

-L: La farmacia… esta en Palma.

-A: Pues le diré a mi niño que me lleve, a mí y a Yuna, que no quiero dejarla sola.

-L: ¡Ah! Se me olvidaba, ve preparada. ¿Sabes alguna técnica de lucha?

-A: Bueno, yo de pequeña me pegaba con mi hermano, pero creo que no servirá. Ahora que pienso, Yuna y yo hemos estado practicando un par de técnicas ninja secretas.

-L: Muy bien. Perfecto. Entonces estas preparada para lo peor.

-A: ¿Para lo peor?

-L: Que os pillen y os metan en la cárcel.

-A: ¿Metan? ¿Y a ti?

-L: A mí no, yo soy muy importante, no me voy a manchar las manos. Pude comprobar el otro día que yo era el cerebro del grupo.

-A: ¿Y las otras dos?

-L: Una era una zona erógena y la otra los nervios.

-A: Bueno, te tengo que dejar.

-L: ¡OK! Ya te diré como ha ido todo.

-A: Sí, gracias. También dime a que farmacia vamos a robar y a que hora quedamos.

-L: Por supuesto. Pues entonces, nos vemos. ¡Adiós!

-A: ¡Adiós nin!

Al día siguiente fui a donde había quedado con los miembros del foro. Como de costumbre llegué pronto, pero ellos no tardaron mucho en llegar. Se acercaron Elegancia, Ani-chan y otro miembro que llevaba un kanji en la camiseta.

-Litos: ¡Hola Elagancia, Ani-chan! ¡Hola! ¿Qué tal? Soy Litos. ¿Tú eres…?

CONTINUARÁ

KUMIAI 3ª parte: mirador de dispositivos de seguridad de farmacias

-Litos: ¡Hola! ¿Llevas mucho esperando? Soy Litos, ¿y tú?

-Ani-chan: Yo no soy Litos, soy Ani-chan, bueno, no soy Ani-chan, no es mi nombre, Ani-chan es sólo mi nick, es decir, mi seudónimo.

-Litos: No era necesaria la explicación, lo había entendido desde el principio.

-Elegancia: Yo también.

-A: ¡Ah! Pues yo no lo había entendido.

-L y E: …

-A: Estooo… ese no es el tema principal. Habíamos quedado para hablar de que compramos para la fiesta.

-E: ¿Qué fiesta? Habíamos quedado para hablar de la situación en el foro, de la desaparición de la gente.

-A: ¿Qué la gente desaparece? ¡No me había enterado! ¡Qué miedo!

-L: No, aquí el tema importante es el viaje a Japón.

-A: ¿Vamos a Japón? ¿Cuándo? No he ahorrado suficiente.

-L: ¿Siempre te ha costado tanto pillar las cosas?

-A: ¿Qué cosas?

-L: Me vale como respuesta. Sigamos con el tema, iremos a distintas farmacias para mirar sus distintos dispositivos de seguridad.

-E: Eso no es problema, una patada y adiós seguridad.

-L: En parte tienes razón, aunque es necesario que no seas la única que tenga técnicas de ataque. Ani-chan, ¿sabes alguna?

-A: Sí, pero es un secreto.

-E: Secretos a mí, ahora verás.

Elegancia hizo una técnica de judo e inmovilizó a Ani-chan en el suelo de ese parque lleno de cagadas de paloma.

-A: ¡KYYYAAAAAAAAAA!

Un chillido ultrasónico destruyó todos los cristales de un kilómetro a la redonda, hizo que a todos los árboles se les cayeran las hojas y reventó a todos los ínsectos, el parque parecía una máquina de palómitas. Cuando recobré la conciencia Elegancia estaba desmayada en el suelo, igual que todos los viejos y niños del parque, Ani-chan estaba en un rinconcito.

-L: Te pasa algo.

-A: Es que me dan miedo los bichos.

-L: Tú si que das miedo. Será mejor que vayamos a mirar la primera farmacia. Elegancia despierta.

-E: Cinco minutos más mami… uissss… ¡Buenos días!

Como la farmacia más proxima estaba lejos, decidimos ir en coche. Elegancia no estaba en condiciones de conducir, así que conducía Ani-chan.

-E: A mí me parecía que la vieja que estaba a mi lado casa la palma.

-A: ¡Palma! Jajaja, dice palma, jajaja.

-L: ¿Eh? ¿Por qué te ries?

-A: Por la canción: Palma (plasplasplas) Palma de Mallorca.

-E: Te acabas de pasar la calle de la farmacia.

-A: ¡Ajjjjjjjj! Jopetas, ¿y ahora qué hago? ¡Ya me he perdido!

-L: No es necesario que te pongas a llorar, da la vuelta a la manzana y listos.

-A: Pero me guiais, ¿vale?

-E: Vale, pero mira la carretera.

-L: Acordaos de que al entrar tenemos que mirar todos los dispositivos, y sin que se note, ¿de acuerdo?

-A: De acuerdito jeje

-E: ¡Oh Mai Got! (“¡Oh Nunca Vaso!” en mallorquín) ¡Te has pasado la calle otra vez!

-A: Gilipepas, es por vuestra culpa, ahora ya no sabré como volver a casa.

-L: … ¡Eres Superhipermegaultracortitadelamuerte!

-A: Jopetas, es que me liais.

-E: Mejor lo dejamos para otro día. Mejor si vamos andando.

-L: Tienes razón, mejor que lo dejemos por hoy, ya es tarde. Quedamos mañana, a la misma hora y en el mismo sitio. Yo me encargo de avisar a otra persona del foro.

-E: Vale, yo también me encargo de decírselo a otra persona.

-A: ¡Ok! También se lo diré a otra personita, será superdivertido jeje.

-L: No vamos a divertirnos.

-E: No, vamos a pasarlo de puta madre ¡Oehhhhhhh!

-L: Guarda las energías para el día del robo.

-A: ¿Qué robo?

-L: ¿Por qué crees que teníamos que mirar los dispositivos de seguridad de las farmacias?

-A: Creia que era tu trabajo, mirador de dispositivos de seguridad de farmacias. Te iba a decir que te pasaras por la farmacia de mi hermano para mirar si estaba bien.

-L: ¡Tu hermano tiene una farmacia? Interesante, muy interesante.

-E: Condones gratis, ¡Yujuuuuuuu!

-A: Aisss nooo, de esos temas no hablo, que me dan vergüenza.

-E: ¡¿Cómo que no?! Ven aquí que te voy a hacer un favor

-A: ¡KYYYAAAAAA!

Como llevaba tapones en los oidos esta vez no me desmayé, me dio tiempo de hacer unas cuantas fotos con las cuales hacerles chantaje. Me fui a mi casa pensando en todas las posibilidades de robo. Cada una tenía sus cualidades: Elegancia sus técnicas de lucha y Ani-chan su superchillido, aunque ambas me habían dicho que no me habían dicho todas sus cualidades, que sólo en el momento del robo dejarían ver.

Sonó mi móvil, ponía miembro foro.

-Litos: Diga, soy Litos, ¿Quién es?

CONTINUARÁ

KUMIAI 2ª parte: la fontana

-Litos: ¡Hola! ¡Encantado! Soy Litos, ¿y tú? ¿Cómo te llamas?

-Elegancia: ¡Hola! Soy Elegancia, encantada de conocerme y de que me conozcas.

-L: Has tardado un poco, ¿te ha pasado algo?

-E: No, lo que pasa es que he ido al sitio donde había quedado después de comer con otro de los miembros. Lo que al no verle he pensado “¡ostia! ¡Qué yo he quedado en el restaurante de mala muerte!”, así que he venido lo más rapido posible, pero para encontrar un parking he dado más vueltas que unas bragas en la lavadora.

-L: Entonces no ha sido nada grave, menos mal. Supongo que ya sabes la gravedad de la situación, que como sabrás es de 9’81 metros partido segundo al cuadrado.

-E: Sí, lo sé, el precio del barril del petróleo ha vuelto a aumentar.

-L: ¿Y si en vez de en barril te lo llevas en una botella de plástico?

Vino un camarero e interrumpió la conversación.

-Camarero: ¿Qué va a pedir la señora?

Elegancia empezó a tener espasmos y a echar espuma por la boca

-E: Señora… me ha llamado señora… señora, señoraaaaaaa.

-C: Discúlpeme, prefiere que le llame caballero.

-E: No, llámame Señorita o, si lo prefieres, llámame diosaaaaaaaaaaaaaaa.

-C: … Bueno, ¿qué va a tomar?

-E: Pues póngame unas hamburguesas sin gluten y para beber… ¡uy! Disculpa, pero no veo la carta de vinos.

-C: En este establecimiento no ofrecemos productos con alcohol a nuestros clientes.

Elegancia parecía una fuente, era preciosa toda esa espuma, hice unas cuantas fotos, parecía como si estuviera en Roma con todas esas fuentes, la “Fontana di Eleganza”, porque no tenía suelto, que si no le tiraba un par de céntimos por si daba suerte.

-E: Sin alcohol… sin… sin… sin alcochol…

En menos de medio minuto Elegancia salío corriendo hacia su coche y volvió con una botella de vino.

-E: Menos mal que tenía una botella de reserva para las emergencias, una botella del mejor lambrusco de Lambronia.

-C: Bueno, les traigo lo que han pedido.

El camarero se fue a otra mesa

-E: ¡Tíooooooo! ¿Has visto como me han tratado? ¡Madre mía!

-L: Sí, es verdad, no deberían tener tantos miramientos y echarte directamente a la calle, ¡es una vergüenza!

-E: ¡Ay! ¡Qué me meooooo! ¡Cómo me río!

-L: Y, si te meas, ¿por qué no vas al baño?

-E: Pues es verdad, ahora vuelvo, voy al baño y de paso cojo un par de rollos de papel higiénico y me los llevo a casa. Ahora vuelvo.

Allí se iba Elegancia, hacia los baños. No tardo mucho en volver con dos de esos rollos enormes que ponen en los baños de los colegios, para que nadie se diera cuenta, escribió sobre los rollos “Hago origami y esto es una ensaimada, ¿a qué lo parece?”. Justo sentarse ella, apareció el camarero con nuestra comida.

-C: ¿Quieren fruta de postre?

-E: Fruta… disfruta… frota… ¡ESTOY HARTA DE TANTO FROTAR!

-C: … Veo que no quieren, si necesitan algo más, hagan el favor de cogerlo ustedes mismos.

El camarero se fue, parecía que le dolía la cabeza.

-L: Bueno, vamos ya a centrarnos.

Los dos nos pusimos en medio de nuestras respectivas sillas.

-L: ¿Qué sabes del problema del foro?

-E: Nada, ¡tíoooo! Mi novio no me deja conectarme en su casa porque dice que sois una mala influencia y que he cambiado mucho, que antes no era así.

-L: Pues te informo, es necesario que busquemos al culpable de las desapariciones de miembros del foro, pero más importante es que encontremos una manera de poder ir a Japón.

-E: Entonces estamos de acuerdo en que lo primero es conseguir dinero y que cuando lo tengamos ya nos preocuparemos de los desaparecidos, pero ¿y si les ha pasado algo?

-L: Tranquila, tenemos cuartada, la policía no puede venir tras nosotros si encuentran algún cadaver o sangre por el suelo.

-E: Menos mal, eso me tranquiliza, pensar que voy a tener a los maderos todo el día pegados en el cogote como piojos no me hacía mucha gracia. ¿Has pensado algún metodo para conseguir dinero fácilmente?

-L: Sí, por supuesto. Una vez un amigo me dijo que los farmacéuticos tienen mucho dinero, así que tendremos que robar una farmacia.

-E: Muy bien, por mi perfecto, necesitaba comprar aspirinas, así las tendré gratis. Pero es necesario que miremos unas cuantas farmacias antes de atacar, para saber cual es la presa más fácil.

-L: Sí, tenemos tiempo para eso. Pero debemos estar preparados para la acción.

-E: ¡Sí! ¡Sí! ¡Yuhuuuuuu! ¡Tíooo! ¡Cuánto tiempo sin salir de marcha!

-L: Creo que no me has entendido, me refería a cuando ataquemos la farmacia.

-E: Jajaja, pues de eso no hay que preocuparse. Estas hablando con una cinturón negro en “judo-taekwondo-karate-sumo-violación”.

-L: Interesante, interesante. Aunque para estar más seguros y evitar que nos puedan espiar, es necesario hablar en clave, para que nadie nos entienda.

-E: Tienes razón, pero que lenguaje utilizamos.

-L: Ya lo tenía pensado, vamos a utilizar el pitufo.

-E: ¿El pitufo? Ponme un ejemplo.

-L: Vale, un ejemplo… pues “te voy a pitufar por el pitufo porque eres un pitufo de la gran pitufa y un pitufón”.

-E: ¿Cómo? ¿Has dicho “te voy a dar por el culo porque eres un hijo de la gran puta y un cabrón”.

-L: ¡No! ¡Claro qué no! Te acabo de decir que “te voy a coger del brazo porque eres un amigo de la gran ciudad y un guasón”.

-E: ¡Ah! Pues no lo había pillado…

-L: Entonces será mejor que dejemos los mensajes en clave.

-E: Sí, será lo mejor. Yo ya he terminado de comer, ¿y tú?

-L: Yo también ya nos podemos ir.

-E: ¿Sin pagar?

-L:Sí, el dueño es mi amigo y me invita, vámonos.

Salimos fuera y como casi era la hora indicada decidí acompañar a Elegancia, fuimos hasta donde había quedado con otro de los miembros del foro. Cuando llegamos al sitio había alguien sentado en uno de los bancos del parque, llevaba el kanji en el pantalón, era uno de los miembros del foro.

-Elegancia: ¡Hola! ¿Qué tal? Encantada, soy Elegancia, aunque eso ya lo debes suponer.

-Litos: ¡Hola! ¿Llevas mucho esperando? Soy Litos, ¿y tú?

CONTINUARÁ

KUMIAI 1ª parte: en el restaurante de mala muerte

En un lugar indeterminado, al cual llamaremos Palma de Mallorca (pero vamos, por poner un sitio cualquiera) en el año 2005 después de la invención de los reyes magos, se creó una organización criminal. El nombre de esta organización era “Investigación Molecular de Ombligos de Yak Nacidos Únicamente en Kioscos”, en siglas Imoynuk, pero como la combinación de siglas no molo, se cambió y el nombre que quedó fue Kunyomi. Pero seguía sin gustar, así que se cambió a Kumiai, que significa "me pica la nariz pero tengo las manos ocupadas cargando las cajas de manzanas" en japonés. Los miembros de esta organización eran gente dispuesta a cualquier cosa con tal de conseguir su principal objetivo, ir a Japón.

Pero no todo salió según los planes de la organización, algunos de los miembros empezaron a desaparecer en situaciones extrañas y lo más raro de todo, no dejaban ningún rastro. Ante la crítica situación que se vivía, se decidió que los miembros tenían que reunirse en secreto para evitar la desaparición de la organización. Nadie conocía a nadie, así que se decidió también que todos los miembros de Kumiai, en sus encuentros clandestinos, tenían que llevar algún kanji visible.

Y esta era la situación. Yo, Litos, uno de los miembros de la organización criminal Kumiai, me dirigía al lugar señalado para hablar de la situación con uno de mis compañeros, al cual no conocía, y empezar con nuestras acciones para poder cumplir con nuestro objetivo. El lugar era un restaurante a las afueras de la ciudad, mientras caminaba podía ver que el estado de las aceras iba empeorando hasta el punto de que caminaba sobre tierra. Allí estaba el local de mala muerte en el que había quedado con mi compañero. Entré lo más rápido posible.

-Mala Muerte: ¡Bienvenido! ¿Tiene mesa reservada?

-Litos: Sí, por supuesto. A nombre de “toma flan Danone, no pares, no pares”.

-MM: Espere un momento que mire… sí, aquí está, ¡oh! ¡La mesa al estilo japonés! Tiene buen gusto.

-L: Sí, lo sé, siempre me lo dicen.

-MM: Acompáñeme.

-L: Sí.

Me acompañó a la mesa central del restaurante, desde la cual se podía contemplar a todas las mesas y desde todas las mesas se nos podía admirar. Un sitio perfecto para pasar desapercibidos. Nada más llegar, me senté.

-MM: Perdone si soy indiscreto, pero, ¿podrá pagar la comida?

-L: ¿Está dudando de mi poder adquisitivo?

-MM: No, disculpe, lo digo por lo que lleva en la bandolera, esa letra china, es muy friki, ¿no?

-L: ¡¿Me está llamando friki?! ¡No me lo puedo creer, que deshonra! ¡Yo, que soy un gourmet de la revista “Restaurantes que te Cagas en las Bragas” y que he venido exclusivamente a comer por que me habían dicho que la especialidad de la casa estaba tan buena que te chupabas los dedos de los pies! ¡¿Este es el trato que dan a los clientes en su local?! ¡Quiero la hoja de reclamaciones! ¡Qué indignante! ¡No me lo puedo creer! ¡Qué ofensa hacia mi persona!

-M: Lololo lo siento, disculpe, no quería ofenderle, me sabe muy mal. Por favor, siéntese y apague las bengalas. Todos los clientes están mirando y van a creer lo que no es. Por favor, no chille tanto. Para solucionar mi error, le invitamos a todo lo que quiera.

-L: Perfecto, de primero, una sopa, de segundo, unas pechugas de pollo con patatas fritas, de postre, una tarta de queso con mermelada de fresa y de beber, tráigame una botella de agua. No, no quiero café.

-MM: … Pero, lo que ha pedido no es ninguna de nuestras especialidades. ¿No lo tendría todo planeado desde el principio para que la comida le saliera gratis?

-L: ¡¡Pero bueno me está…

-MM: Vale, vale, ahora le traigo lo que ha pedido, pero haga el favor de guardar el megáfono.

-L: No, tiene que venir otra persona, esperaré hasta que llegue.

Como de costumbre había vuelto a llegar muy pronto y todavía faltaba un cuarto de hora para que llegara mi compañero. Mi fantástico plan “Lo bueno, si gratis, dos veces bueno” había salido a la perfección. Mientras esperaba decidí escuchar las conversaciones que había a mi alrededor, quizas pudiera sacar tajada más tarde.

-Camarero: ¿Ya se ha decidido?

-Señora mayor: Sí, joven. Quería una pizza de… ¡ay! ¿Cómo se decía…? ¡Qué cabeza tengo…! Espere, espere, que lo tengo en la punta de la lengua.

-C: Si me dice cuales son los ingredientes, yo le puedo decir cual es.

-SM: ¡Ay, joven! Pues creo que llevaba… tomate, pero no a rodajitas ¿eh?... queso, pero no era manchego, que yo crea… también croquetas de pollo… ¡ay! No, espere, que creo que me estoy equivocando de plato…

-C: Pues… la verdad, no sé a cual se refiere… con esas pistas… si un caso, vuelvo en cinco minutos y me dice cual quiere, ¿vale?

-SM: No, no, no. Ya sé cual es, ¡una que dure todo el año!

-C: … Por un casual, ¿no se estará refiriendo a una cuatro estaciones?

-SM: Sí, esa, pero ¡ay, joven! Yo como muy poco, me basta con una primavera, ¿vale?

-C: … Vale… ahora mismo se la traigo.

Decidí escuchar otra conversación.

-Señor: Te he dicho que te comas la carne.

-Niño: Pero es que ya estoy lleno, jooo…

-Señor: ¡Qué te la comas!

-N: No, a partir de ahora soy hervíboro.

-S: Así que ahora te ha dado por ser hervíboro, a mí me da igual, no te la comas, esta noche para cenar te comerás el césped del jardín.

-N: ¡Ajjj, no! ¡Qué asco! Entonces soy heladívoro.

-S: ¡Cómo no te la comas te voy a dar un guantazo!

-N: Eso es maltrato infantil y te puedo denunciar.

-S: No, eso se llama “o te comes la carne o cuando vuelva tu madre del baño le digo quien a cogido su sujetador para tirarle huevos a los gatos de los vecinos”.

-N: … Jooo, ¡cómo te pones por diez trozos de carne! Ya me los como, ya…

Otra conversación sin nada de provecho, cambié de conversación.

-Señor: ¡Qué guapa eres Pili!

-Chica: Esto… me llamo María, ¿quién es esa Pili?

-S: Nadie, nadie, yo sólo te quiero a ti. Estaba pensando en los nombres de nuestros hijos.

-C: ¡Ayyyy, qué bueno eres Fernando! Como me gustaría tener hijos, ¿Cuándo te gustaría tenerlos?

-S: La verdad, no lo sé, pero primero me gustaría divertirme un poco, como el sábado, ¿a que sí, Isa?

-C: … ¿El sábado? Pero si yo estaba en Barcelona de viaje de negocios…

Esta conversación estaba más que interesante, pero la tuve que dejar a medias. Me fijé en la entrada, había una persona con un Kanji en la chaqueta. Era mi compañero, se estaba acercando a la mesa con paso firme. Se paró en frente de mí y me sonrió.

-Litos: ¡Hola! ¡Encantado! Soy Litos, ¿y tú? ¿Cómo te llamas?

CONTINUARÁ

Las manchas de Yólez

Desde hacía tiempo Elegancia empezó a notar unas manchas extrañas por las paredes de su casa, unas manchas de origen desconocido. Cada vez que las limpiaba (cada año bisiesto), volvían a aparecer. Ante este suceso extraño, decidió llamar a la ONU para que un científico viniera a analizarlas y las eliminara o las incluyera en la lista del patrimonio de la humanidad, así Elegancia podría dormir tranquila sus dieciséis horas al día, para poder despertarse como una rosa de pitiminí. Días más tarde oyó el timbre, alguien llamaba a la puerta. Elegancia abrió.

-¡Buenas días! ¿Qué desea?

-¡Buenas noches! Soy Isidro Benítez Menéndez, pero me puede llamar IBM. Soy el científico que pidió de la ONU, para que estudiara un suceso extraño.

-¡Por fin las Naciones Unidas me hacen caso!

-¿Naciones Unidas? Se equivoca, soy de la “Oy No Uimos”, porque siempre que vamos a un sitio para explicar nuestras tesis tenemos que salir corriendo porque la muchedumbre nos quiere matar.

-Pero “hoy” y “huimos” van con hache.

-¿Sabe que “separado” se escribe todo junto y “todo junto” se escribe separado?

-¡¿Eh?!

-¿Me puede mostrar el suceso extraño, por favor?

-Sí, claro, ahora mismo le enseño las manchas.

-¿Manchas? Yo venía a mirar una obra de Miró.

-¿De Miró? ¿El pintor?

-No, de Miró Pafuera, autor de la réplica en palillos del Gorrión Centenario (hermano pequeño del Halcón Milenario).

-¡Ah! ¡Vale! Entonces se ha equivocado, la que debe tener esa obra es la vecina del quinto, que es un poco rarita, aunque a mí no me gusta criticar, pero si quiere le hago la Torre Eiffel con cerillas que no se prenden por mucho que frote… ¡ESTOY HARTA DE TANTO FROTAR! Perdón, es un tick que tengo.

-Bueno, si no le importa, puedo echarle una ojeada a las manchas.

-Entonces, ¿se lo cuento?

-No, mejor me lo novela.

-Como usted quiera. Todo empezó el año pasado. Un día, sin darme cuenta, empezaron a salir manchas por las paredes, manchas con distintas formas, de cojín, de manta, de lámpara, de globo, de hula-hop, de manos, de pies, de cuerpos y cabezas. A mi casa no viene nadie, sólo estoy yo, así que no sé cómo han podido aparecer estas marcas. Lo peor de todo es que un día me compre una tarta y cuando llegué a casa le había aparecido una cara ¡y me sonreia! Pasé un miedo atroz.

-¿No serán manchas de humedad?

-No, lo he comprobado, sólo tengo manchas de humedad en el baño y esas tienen forma de animalitos.

-Entonces, muéstremelas, estoy ansioso por admirarlas.

Elegancia le dijo a IBM donde estaban las manchas, mientras ella preparaba unos tés. Después fue donde estaba IBM y escuchó su explicación.

-La verdad, son muy extrañas.

-Eso que está mirando es un espejo, si hace el favor de venir al “salón”, le enseñaré las manchas.

Mientras se tomaban el té, IBM tomó todas las muestras necesarias para poder investigar las manchas en su laboratorio clandestino.

-¡Oh! ¿Ha visto esta mancha? ¡Es distinta, está en el suelo, no en la pared, como las otras, de color rojo, más pequeña que las demás y tiene forma de extraterrestre!

-¡Ups! ¡Perdón! Eso es una mancha de ketchup del otro día, ahora la limpio.

-Le seré sincero, no sé cual es el origen de las manchas, es un caso único, tiene que ser estudiado por especialistas en ciencias políticas.

-¡Qué bien! Siempre he deseado salir por la tele.

-No se preocupe, en menos de dos lustros el caso estará resuelto.

-Muchas gracias, si quiere quedarse a comer.

-No puedo, tengo prisa, he quedado para cenar mañana. Mejor le llamo y nos vemos otro día.

-Entonces me pondré parches en los ojos.

-Entonces, yo le llamo, ¡adiós!

-¡A Buda!

Una soplada anunciada

Vege llegó a mi casa puntual, no se había perdido, lógico y normal, ya que había recibido mis grandes explicaciones para llegar (sólo conozco a una persona que se haya perdido con mis grandes explicaciones y seguro que todos sabemos quien es). Metimos todo lo que tenía que llevar (mantas, cojines, la consola, el cadaver…), parecía que me iba de casa, pero no, sólo me iba al cumpleaños de Karoru y lo más sorprendente, nada de lo que llevaba eran regalos para ella, sino lo que en teoría se tenía que utilizar en la fiesta. Seguidamente fuimos a buscar a Tenshi, durante el trayecto nos llamó Elegancia. Estaba tan aburrida que había decidido ponerse a limpiar los cristales de su balcón, pero luego decidió llamarnos para evitar cometer esa locura y decirnos que si no llegábamos en cinco minutos, corríamos el riesgo de tener que sufrir en nuestras carnes su temible ataque violador. Recogimos a Tenshi sin ninguna complicación (esta parte es aburrida porque no conduce Ani-chan). Llegamos a casa de Elegancia puntuales y resulta que ella llegaba junto a nosotros (voy a tenerle que decir a Vege que no me venga a buscar más, que sino me quedo sin historias que contar). Elegancia nos recibió como si hiciera cincuenta años que no veia a nadie y sólo llegar nos obligó a hinchar globos, que como ella era alérgica a soplar no podía hacerlo. Después de soplar y soplar y de hinchar e hinchar ya terminamos el trabajo (la buena acción del año). Elegancia nos dijo que había ocurrido un accidente cuando venía hacia su casa, había puesto en los asientos traseros de su coche la tarta y su mochila y en una de esas curvas que ella toma tan lentamente (creo que ostenta el record Guinnes de la persona que más rapido puede tomar una curva mientras lee una revista y se rasca la cabeza con una pierna (todo a la vez)) que la mochila decidió violar a la tarta, por lo que teníamos que comprobar que daños tenía. Teníamos que ir con cuidado, así que como los que trabajan en C.S.I., quitamos las capas de envoltorio para descubrir que la tarta no había sufrido daños, bueno, le había salido una cara, como en Bélmez, pero a eso no le dimos importancia. Por fin llegaron los que faltaban: Ani-chan, Leaf, Karoru y sus dos amigos Wew (él) y Kaiag (ella). Kaoru y Susanoo no habían llegado. Decidimos ponernos a comer. Despúes de arrasar como una nube de langostas africanas, había llegado el momento de lo más esperado “la lucha a muerte”. Cojines, mantas y globos golpeaban todo lo golpeable, la gente se agarraba, se arreaba y se tiraba al suelo. La noción del tiempo y el espacio se perdió y cuando sólo quedaba sudor por todos lados nos preguntamos donde estaban Kaoru y Susanoo. Se pudo hablar con ellos y por problemas técnicos no podían venir, horror. Ellos iban a irse pronto y se llevarían con ellos a Kaiag porque al día siguiente tenía un examen. El consejo de sabios se reunió y se decidió que Vege acompañaría a Kaiag, Leaf y Tenshi a sus respectivas casas, Ani-chan iría con él para que no volviera solo. Pero antes de que se fueran, Karoru tenía que soplar las velas y recibir los regalos. Así que Elegancia y yo, Litos, nos disponíamos a encender las velas, pero necesitábamos un cómplice, así que le dijimos a Ani-chan que la entretuviera. Como había la posibilidad de que Ani-chan soltara una de sus perlas como “Karoru no vayas a la cocina porque están encendiendo las velas” o “todos pueden ir a la cocina menos Karoru”, nos dimos mucha prisa en encender las velas. Se apagan las luces, aparece la tarta y Karoru con su cara iluminada (no me refiero a que estuviera contenta, es que las velas hacen luz) sopló y sopló y la casita derrumbó… ay, no, me he equivocado de historia. Pues eso, que soplaba y soplaba y las velas se resistían, ya casi sin aire se dio cuenta de que las velas eran de esas especiales llamadas “lashijasdeputaquecuantomassoplasmasseencienden”. Llegamos a lo más deseado, la entrega de los regalos. Empezó con el de Kaiag, una camiseta de un perro que por detrás ponía “soy una perra”, a Karoru le gustó. El siguiente fue uno de los regalos de Wew, una revista de Yaoi, en eso, una inundación de fluidos corporales procedentes de Karoru inundó la sala (todo el chorrete). Después de limpiar, vino el primero de la organización criminal llamada Kunyomi, un peluche de un personaje de un manga, le gustó. Luego otro de la organización, un libro de una niña rara, le moló. Luego otro de Wew, tomos de un manga que le gusta a Karoru, otra inundación recorrió la sala (habíamos dejado la puerta abierta, así nos evitabamos tener que limpiar tanto). Por último, recibió dos más de la organización, una falda de gitana (se la robamos a una) y unos condones (ella miró golosa a su consolador). Por cierto, mientras se hacía la entrega de regalos, Leaf se dio cuenta de que me sangraba el brazo. Una herida que me llegaba del biceps al triceps pasando por los gemelos y el esternocleidomastoideo. Se dedujo que durante la guerra alguien me había dado con un cojín, un globo o un cuchillo jamonero. Después se sabría que había sido Karoru, que llevada por la envidia me quería hacer desaparecer. Otra que se dedujo que podía ser la autora de los hechos fue Ani-chan, que a lo mejor se pensaba que durante la guerra se podían utilizar armas (hay que darle las gracias a Elegancia de que en su casa no tuviera un misil o un rifle). Gracias a las grandes habilidades médicas de Elegancia, salí del peligro de muerte y pude volver a la fiesta, más envuelto que una momia, pero vivo. La hora de la despedida, adiós Leaf, adiós Tenshi, adiós Kaiag. Como Ani-chan y Vege les llevaron y teníamos que esperar a que llegaran, nos fuimos a chafardear y ver unas fotos. Las fotos eran de Elegancia, Karoru, Ani-chan, la sobrina de Elegancia, la mascota de la sobrina y un pez luna, se ve que todos juntos se fueron de marcha. En estas fotos se demuestra la verdad de las apariencias (me llamo Karoru….chan) y de los chicles. Llegados Ani-chan y Vege, ella decidió irse a la cama porque al día siguiente tenía que ver jugar a su hermano algún deporte (se ve que ella en las gradas se emociona y tiene que darlo todo para animar a la afición). El resto, jugamos al uno, por supuesto, no hace falta que lo pregunteis, Elegancia hizo trampas. Luego a un juego de preguntas y respuestas musicales. Y el final de la fiesta fue chafardeo y unas risas continuos, con fobias, cuchicheos y poner verde a la gente que no estaba ((mira que perra es esa, mira el otro que pintas lleva…) que quede claro que a mí no me gusta criticar). Terminó la fiesta no sin antes recogerlo todo y despedirnos de Elegancia, teniendo como música de fondo los ronquidos de Ani-chan, que esa noche se parecían a la última canción de Madonna.

Fobias

Aquí teneis una lista de 20 fobias, seguro que conoceis a alguien que padece alguna o varias:

-Joputanomedejesconlaintrigafobia: Miedo a terminar de contar las historias.

-Proximaparadaplazadeespañafobia: Miedo a que una paloma o un estornino se te cague encima.

-Terceraplantajugueteriafobia: Miedo a que alguien se tire un pedo en el ascensor.

-Kiyoandevasfobia: Miedo a perderse.

-Mamahasvistoahamhamniñoshoycomemosarrozbrutfobia: Miedo a que maten a tu hamster y te lo pongan en la comida.

-Calimochoalasochofobia: Miedo a los macrobotellones del paseo marítimo.

-Hanmatadoalchinocudeirofobia: Miedo a los comentaristas de Humor Amarillo y a la repetición incesante de las mismas “bromas”. Esta fobia también conlleva las ganas de matar a esos comentaristas.

-Cagoenelputapezsolfobia: Miedo a pescar ciertas clases de peces en la playa.

-Salidaoncesalidaoncesalidaoncemierdamehemetidoenladiezfobia: Una de las variantes de la kiyoandevasfobia.

-Buenoyomevoyduchandotranquilamentefobia: Miedo a llegar puntual.

-Mehasdadoentodoelojofobia: Miedo a las guerras de cojines.

-Cabronesmiradcomomehabeisdejadolasparedesfobia: Esta fobia siempre afecta horas despúes de la mehasdadoentodoelojofobia.

-Baqueiraberetfobia: Miedo a ir de viaje a Andorra.

-Nosiamimedaigualfobia: Miedo a no saber que comprar de regalo.

-Queesesodelpezsolfobia: Miedo a no saber de que se habla.

-Loquehayesuncincorojoynopuedesponerunsieteazulfobia: Miedo a no poder hacer trampas.

-Losvientosquellevaronacristobalcolonaamericaparistorreeiffelloscamposfobia: Miedo a encontrar la solución a algún enigma. También es el miedo a la Wikipedia.

-Puesenelcapitulocuatrocientosseisdeonepiecefobia: Miedo a que te spoileen.

-Alucinalubinafobia: Miedo a los chistes de Animal Crossing.

-Nomamasoloeraanichanquesereiafobia: Miedo a los sonidos demasiado altos.

Con un buen par de esquís

Ani-chan quería darse un capricho, en vez de comprarse ropa como hace todo el mundo, decidió pagarse un viaje a Andorra (Baqueira para los amigos), el problema ahora es que no tenía un acompañante. Lo encontró fácilmente, amenazó a un amigo con su risa supersónica y, claro, su amigo aceptó (no tiene nada que ver que su amigo sabe esquiar hasta con la nariz). Con los nervios a flor de piel (será una rosa, será un clavel, será un cardo borriquero…) iba en su vuelo directo Palma-Andorra pasando por Helsinki. Por fin en Andorra (Hola Leti! Esta blusa te queda superdivina, sabes?) Ani-chan y su amigo (llamemosle Chof) decidieron que ese día no irían a esquiar (empezamos bien). Al día siguiente con un sol estupendo que sonreía y guiñaba el ojo, Ani-chan y Chof se fueron a las pistas en un autocar. Ani-chan al ser primeriza quería hacer lo básico, pero Chof haría snowboard (o como narices se escriba). Al llegar a las pistas, antes que poder deslizarse sobre la nieve (sí, se ve que en las pistas de esquí hay nieve, que cosas), tenían que subir la montaña. Ani-chan ante el desespero de tener que subir a pie quería irse, pero Chof tubo una genial idea, lo mejor que podían hacer era coger o el telesillas (que te lleva por las alturas) o un hierro duro y frío que te pones entre las piernas, con una superficie más ancha al final que te la colocas en el culo y te lleva arrastras (no, no es un consolador pegado a un tractor). Ani-chan quería utilizar el hierro por que nunca lo había probado, pero como primeriza, era mejor que cogiera el telesillas, Chof cojió el hierro duro y frío. Ani-chan subió en el telesillas, pero con su vertigo no quería mirar abajo. Valientemente miró hacia el vacío abismo que se abría a sus pies y, las personas parecían ratoncitos (ah, no, que eso eran ratoncitos). Ani-chan creía que el viaje en telesillas estaba durando demasiado y que seguro ya se habían pasado Andorra (como es tan chiquitín), pero finalmente vio el final, su larga travesía terminaba. Llegó a lo más alto de la montaña y decidió esperar a Chof, pero después de un buen rato (minuto y medio), se pusó nerviosa al ver que no llegaba. Decidió que lo mejor que podía hacer era bajar la montaña, pero como no sabía esquiar, tenía que llevar los esquís cargando. Las conplicaciones se iban sumando, la nieve resbala y con el peso de los esquís le era más difícil bajar, así que utilizó una de sus técnicas ninja y bajó de culo. Cuando creía que no podía ir peor empezó una gran tempestad de nieve (mira mamá, un mamut (niño, cuantas veces te tengo que decir que no señales con el dedo)). Bajando poco a poco, paso a paso, avanzaba con lentitud. Pero un ángel salvador, bueno, más que un ángel, era un canario, llegó para socorrerla. Al canario (llamemosle Ñuñ) también le había pasado lo mismo que a Ani-chan, es decir, había venido a la nieve con un amigo experto y el no sabía esquiar. Así que Ani-chan y Ñuñ bajaron la montaña, Ñuñ llevó los esquís a Ani-chan, hasta el final de las pistas y se reencontraron con Chof y el amigo de Ñuñ. Ñuñ se hizo muy amigo de ambos y decidió quedar con ellos para ver un partido de fútbol en la tele (yeah, que emoción). Al día siguiente no pudieron ir a la nieve por que hacía muy mal tiempo, así que estuviron sólo por la ciudad. El último día Ani-chan se despidió de Ñuñ con lágrimas en los ojos y cojió su avión con destino a Palma, no sin antes comprar un recuerdo de Andorra para sus compañeros de clase de japonés (Leaf, Karoru y Litos (este último es él que mejor me cae)). Pero que puede ser el mejor recuerdo de Andorra: nieve en un botella, un esquí roto, un chalet en Marinadorciudaddevacaciones (ahí, todo junto), no, lo que representa mejor a Andorra es un pack de tabletas de Toblerone, en el cual pagas tres y te llevas una de regalo de chocolate blanco (por cierto, a Karoru no le gusta el chocolate y a Leaf no le gusta el toblerone). Y así con una sonrisa de oreja a ojo vino Ani-chan con un montón de historias que contarnos.

En mi foro

En el foro del que soy miembro hay diferentes grupos de usuarios:

-ADICTOS: Se pasan casi cada día por el foro (los fines de semana no es que se pasen mucho...) y comentan los post’s de la otra gente. Son comunicativos.

-GORREROS: Son los únicos que no tienen pc en casa y tienen que mirar el foro en los pc’s de otras personas. Si no escriben mucho lo entendemos y aceptamos. Aun así ellos participan activamente (aunque digan que no saben de nada pueden comentar perfectamente).

-RUEDAS PINCHADAS: Parecía que la cosa iba bien y de pronto dejaron de escribir.

-PERDIDOS: A este grupo pertenecen el resto de miembros del foro. Creen que el foro es un mito y como mito, no creen en él. No se pasarán ni por error. Si se lo echas en cara sus contestaciones a veces asustan ("es que perdí la dirección del foro", ¿no puedes llamar a alguien y pedirla? ¿O también has perdido los números de telefono y las direcciones de correo electrónico?). Si los ves por la calle puedes escupirles a la cara (es un decreto municipal) y también puedes spoilearles sus series favoritas.

Girando en la rotonda a la derecha

Ani-chan sale de su casa y va a recoger a un amigo, de momento todo va sobre ruedas, lógico, van en coche. Se meten en la terrible y peligrosa vía de cintura en dirección a mi casa y aunque no lo sepais también se llega a otros sitios. La despreocupada Ani-chan se la empieza a torrar a su amigo contándole que en Andorra (yo creo que era Baqueira, aisssss) conoció a un canario, pero por el frío yo creo que era un pingüino. Ani-chan haciendo tantas cosas a la vez (conduciendo, chafardeando, pintandose las uñas, haciendo un crep...) se mete en la salida número 10, terrible decisión. Pensando que esa salida te lleva a Andorra (yo sigo pensando que era Baqueira, requeteaisssss) y que no quería volver a bajar una montaña de culo, decide hacer lo más lógico (para ella) en estos casos, regresar a Palma y empezar el trayecto desde el principio. Por fin salen por la salida correcta, la 11 (uisss por una), llegan a mi casa, tarde, como de costumbre. Nos metemos en el coche en dirección a Palma y como ya sabeis que no me mola chafardear el viaje es muy silencioso y no le digo que es cortita y no le explico cual habría sido la solución a su problema. Vamos a buscar a Otto, luego a Tenshi, no hay problemas, que raro, algo malo nos esperaba y nosotros inocentes nos dirigíamos a la plaza de España. Llegamos antes de la hora (para Ani-chan era su segunda vez). La gente llega tarde, como siempre. 5 minutos más tarde empieza a llegar la gente, vienen todos. Desgracia, desgraciada, uno de los asistentes se ha olvidado los micros y han decidido quedar en el Ocimax. Nos metemos en el coche, zarpamos rumbo Ocimax y Ani-chan nos confiesa que no sabe llegar a Ocimax, ni tampoco llegar a su campo desde Ocimax. Estamos apañados, tenemos ante nosotros a la versión femenina de Ryôga y lo peor de todo, ella lleva el volante. Llegamos a Ocimax gracias a mis fabulosas dotes deductivas y como era lógico paramos en el lavadero de coches. Continuan los problemas, hay personas que no saben llegar al Ocimax y se les explica como llegar. Cuando todavía falta un coche por llegar, alguien tiene una genial idea nos vamos ya y se guía a Ani-chan hasta llegar a una carretera en la cual sepa llegar a su campo, se lo dicen mientras ella habla con su novio, el cual lleva con otras personas esperando en el campo desde hace más de media hora. Horror, Ani-chan no puede decirles que falta un coche y se dirigen a una terrible rotonda en hora punta, desaparece el coche que nos guía. No sabemos hacia donde ha tirado. Le llaman al movil y se lo dicen, todos los coches del conjunto consiguen superar la rotonda. Y el primer coche va guiándonos (luces, manos, piernas, gritos, señales de humo...) y conseguimos llegar a una carretera que conoce y empezamos el viaje hacia la casa de campo. A 10 minutos de llegar Ani-chan decide pararse y explica la situación. El consejo de sabios decide que primero se llegará al campo y que luego con uno de los coches se irá a buscar al coche que faltaba al Ocimax. Se vuelve a poner el conjunto de vehículos en marcha y después de un laberinto de casas y chalets se consigue llegar por fin a la casa de campo de Ani-chan. El resto, es historia.